El artista neoyorquino afincado en Logroño Larry Karlin recibió el pasado sábado el premio Mazacote de Oro. Este galardón, otorgado por el pueblo de Alberite, se enmarca dentro de la edición número 43 de su Mazacote de Barro, una exposición colectiva en la que 23 artistas exhiben su arte, pictórico o escultórico, en el colegio Avelina Cortázar, hasta el 10 de septiembre.
Para el artista estadounidense la obtención de este premio ha resultado muy especial: “Estar en Alberite es estar como en casa, siempre me acogen bien”, agradece. De hecho, Karlin ha participado en numerosas ocasiones en la muestra Mazacote de Barro y, en 2006, fue él el encargado de realizar los premios. En esta localidad, como cuenta, ha podido conocer artistas, no solo del pueblo, sino de toda la región.
En concreto, dentro de la muestra colectiva de este año, Karlin exhibe un lienzo en el que puede verse un coro infantil. 'The Chorus', “un cuadro especial para ese evento”. Y es que, como recuerda, fue en una edición, en 2006, una orquesta que le impresionó “por la calidad”. “Quería hacer algo de música y pinté un coro de niños, significa el momento de celebración”
Licenciado en Biología y en Bellas Artes -“por curiosidad, siempre estoy buscando algo nuevo”, comenta - este pintor ha estudiado en diversos puntos del planeta. Desde Manhattan a Florencia, pasando por Nueva Zelanda, Australia y Latinoamérica. Sus pasos por el mundo han influenciado en su arte. “En Florencia vi arte más clásico, era interesante aprender su técnica”, rememora. Al otro lado, en Tasmania, estudió Arte y Biología al mismo tiempo y conoció a algunos pintores más abstractos. Fue en Logroño donde se asentó hace 17 años (en octubre serán 18). En su primer año en el concurso de Alberite conoció al artista José Antonio Olarte, recuerda, así como a otros artistas y quedó “sorprendido por el nivel, fue impresionante”. Con los años, como artista, “he ido madurando y soltando un poco, se ve mucho más suelto mi arte que antes”. “Pinto con menos miedo.”
Tras la pandemia, emprendió la aventura de abrir un estudio, ubicado en una nave en el número 47 de la calle Rey Pastor. Además de los cuadros de Karlin, el estudio ha recibido otras discilpinas artísticas. Así, acogió uno de los conciertos secretos de Sofar Sounds, el pasado verano, asi como la performance Cuerpo Jondo #Covida, este junio. Además, el próximo domingo, el estudio de Karlin será escenario del Vermú FITLO 'Solo quería bailar', un encuentro con la autora Greta García y sus textos, a las 13:00.