La alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra, ha participado un año más en la fiesta de fin de curso del centro de educación infantil 'Chispita', de titularidad y gestión municipal, y ha entregado los “diplomas” acreditativos a los 60 alumnos que se “gradúan” tras este 2017-2018.
Gamarra, que hace pocos meses también visitó estas instalaciones con motivo del Día de la Familia, ha reiterado su reconocimiento a la labor educativa que los profesionales de 'Chispita' desarrollan, convirtiéndose en “un elemento fundamental de la política de conciliación y de avance social que de forma prioritaria impulsamos desde el Ayuntamiento”.
Un centro que es fundamental en “el impulso hacia la gratuidad de la educación de 0 a 3 años” hacia la que tiende la política municipal combinando un modelo público-privado del que también son parte imprescindibles las 'chiquibecas'.
En este sentido, Gamarra ha recordado que el plazo para solicitar estas ayudas directas a las familias -que suponen entre 1.200 y 2.000 euros anuales- está abierto hasta el 9 de julio, habiéndose recogido ya en torno a 650 peticiones.
Como ha comentado la alcaldesa, con este modelo “el Ayuntamiento busca ayudar a las familias siempre desde la libertad de elección de centro” además de apoyar a “un sector de actividad que genera, además de educación de calidad, empleo en la ciudad”.