Los comerciantes de San Antón han protagonizado este miércoles un pequeño acto de protesta por lo que consideran un acto “vergonzoso” por parte del Ayuntamiento de Logroño en la asignación de ayudas para la instalación de luces navideñas en las calles.
Junto a una mesa repleta de velas encendidas, mediante las que han querido simbolizar la falta de iluminación navideña en su calle, y a pesar de la lluvia, una veintena de responsables de los establecimientos de la céntrica calle han querido elevar sus críticas al Consistorio.
“Parece que si no entramos en Logroño Vivo, no tenemos subvención y eso no lo aceptamos”, ha afirmado Ramón Madorrán, responsable de Ramón Óptica y portavoz de los comerciantes en la zona. Madorrán, que ha insistido en declaraciones a los medios de comunicación en la “independencia” política de los comerciantes de San Antón, ha reclamado que se les escuche y no se les “obligue” a pertenecer a Logroño Vivo. “Porque no queremos hacerlo, no mientras se haga a dedo y no por consenso electoral”, ha aseverado.
Asimismo, los comerciantes de la zona han querido aclarar que han solicitado conversar con el Ayuntamiento de Logroño hasta en cuatro ocasiones respecto a la iluminación navideña. Incluso, según asegura, la propia Defensora del Pueblo riojana, María Bueyo Díez Jalón, ha intercedido sin obtener respuesta alguna por parte del Consistorio.
No sólo eso sino que, según explican, siempre que se pusieron en contacto con el Ayuntamiento de Logroño lo hicieron amparados por la Federación de Empresarios de La Rioja, a la que pertenecen, o diversas asociaciones de calle. “Nunca hemos pedido nada a título individual, como nos han acusado”, ha asegurado Madorrán.
El responsable de Ramón Óptica ha añadido, por otra parte, que San Antón -una de las 45 calles comerciales más importantes de España, según ha recordado- no es la única vía logroñesa olvidada por las luces navideñas este año. Chile, República Argentina, el Parque Gallarza, Zoco o Cascajos tampoco han recibido, según han apuntado, la ayuda consistorial.
“Es vergonzoso y un desastre que una ciudad viva, moderna y a la que tanta gente viene, tenga este año una iluminación tan pobre, de papel, a veces sin bombillas, que parece sacada del baúl de los recuerdos”, ha concluido.