Un grupo de diputados de la opositora Coalición Cívica ha denunciado a la presidenta argentina, Cristina Fernández, y a su esposo, el ex mandatario Néstor Kirchner, por un supuesto enriquecimiento ilícito relacionado con la compra de un hotel de lujo en el año 2008.
De acuerdo con la denuncia presentada por el diputado Juan Carlos Morán, Néstor Kirchner “infringió la ética pública al comprar 2 millones de dólares [1,4 millones de euros] siendo el cónyuge de la presidenta y teniendo información reservada”.
Por su parte, el ex mandatario admitió que había comprado en octubre de 2008, poco antes de la crisis financiera, 2 millones de dólares en divisas para comprar el paquete accionario de Hotesur S.A, firma propietaria del Hotel Alto Calafate, ubicado en la villa turística de El Calafate, cerca de los glaciares en la Patagonia.
Néstor Kirchner ha insistido en que no infringió las leyes realizando esta operación porque estuvo enmarcada “dentro del tope permitido para personas físicas en forma mensual” establecido en 2 millones de dólares.
“No existió obviamente posibilidad de beneficio cambiario toda vez que el pago realizado fue en la misma moneda por la cual se efectuaron dichas adquisiciones de divisas”, señala el correo eléctrico enviado por Kirchner al periodista Víctor Hugo Morales.
La cifra total del importe por la compra de divisas se dio a conocer días después de que el ex presidente del Banco Central de Argentina Martín Redrado (quien mantiene una fuerte pugna con la presidenta Fernández) amenazara con revelar la lista de “personas de poder” que compraron dólares.
Pese a las excusas y argumentos del ex presidente, la oposición argentina insiste en cuestionar la “falta de ética” del matrimonio Kirchner, al que le han salpicado varias denuncias por corrupción en los últimos años.
También la presidenta argentina ha salido en defensa de su familia.
Cristina Fernández ha declarado que “el drama” de su familia es “vivir en blanco” en un país habituado a “la trampa”, al tiempo que cargó contra los directivos del diario Clarín acusándoles de blanquear “casi 300 millones de dólares”.
Fernández ha afirmado que tanto ella como su marido no han cometido ninguna ilegalidad, y ha acusado a otros dirigentes políticos y mediáticos de falsificar sus ingresos. Según la mandataria, en declaraciones recogidas por la agencia Telam, “el drama tal vez de Kirchner sea vivir en blanco en una Argentina demasiado acostumbrada a vivir en negro, en una Argentina acostumbrada a vivir en la trampa”.
La presidenta argentina aprovechó la ocasión para acusar directamente a los directivos del periódico Clarín, de quienes dijo que “tienen una causa por lavado de dinero por casi 300 millones de dólares”. “Y nunca he visto una línea” publicada al respecto, denunció.