Hoy la Asociación de la Prensa de La Rioja (APR) celebra la festividad de San Francisco de Sales, patrón de los periodistas. Y lo ha hecho con una misa en la Iglesia de San Bartolomé oficiada por el vicario general de la Diócesis, Vicente Robredo, a la que ha seguido el tradicional vermú en la sede de la asociación.
En él se ha recordado a “nuestro querido compañero Emilio Ramírez, que nos dejó el pasado 22 de diciembre”. Estíbaliz Espinosa ha sido la encargada de leer la nota difundida aquel día desde la asociación extractada del Primera Plana de su jubilación.
También se ha rendido homenaje a Teresa Alonso que desde el pasado mes de diciembre es ya “una prejubilada feliz tras una intensa vida profesional en Radio Rioja Cadena SER”.
Además, ha habido una mención especial al compañero Ignacio Esarte Muniain, el colegiado nº 1, por sus 50 años de pertenencia a la APR y se ha dado la bienvenida oficial a los doce nuevos periodistas que se han colegiado este año: Mª Pilar Estébanez colegiada nº 288, Joseba Martín nº 289, Judith Cañas nº 291, Ainhoa Tilve nº 292, Rocío Ruiz nº 293, Jöel López nº 294, Luis Javier Ruiz nº 295, Manu Martín nº 296, Soledad Ramírez nº 297, Mónica Arnau nº 298, Marina Benés nº 299 y Celia Fenollar nº 300.
¿Por qué San Francisco de Sales es el patrón de los periodistas?
Francisco de Sales es patrón de periodistas y, quizás nadie conoce el papel esencial en el marco de la Contrarreforma. Nació en Francia en 1567, y murió en 1622. Fue nombrado obispo de Ginebra en 1602, ciudad que había constituido el epicentro de la Reforma llevada a cabo por Calvino. Realizó una labor impresionante en oposición a los herejes protestantes, y fue un maravilloso director espiritual, lo que le llevó a escribir la Introducción a la vida devota (1607), “uno de los libros más leídos en la edad moderna”, en palabras de Benedicto XVI.
Por otra parte, de su relación con Santa Juana Francisca de Chantal nació la Orden de la Visitación, congregación femenina que incidía en uno de los caballos de batalla del santo francés: siempre con humildad, la santidad puede ser alcanzada en las cosas sencillas del día a día. Así, en la obra antes mecionada, Introducción a la vida devota, expresa la necesidad de implantar en los laicos, en definitiva, en todos los hombres, sea cual sea su condición, el deseo de seguir fielmente al Señor. Como vemos, una idea completamente actual, a la cual el Concilio Vaticano II proporcionó un gran empuje. Posteriormente, en 1616, escribió el famoso Tratado del amor de Dios, obra de alto contenido místico, que también trataba la relación intrínseca entre razón y fe. Fue proclamada Doctor de la Iglesia por Pío IX en la segunda mitad del siglo XIX.
Pero dicho todo esto, ¿por qué es considerado entonces San Francisco de Sales patrón de los periodistas y escritores? Se cuenta de él que intentando convertir a los protestantes, al ver que por miedo o por otros motivos éstos no se dejaban predicar, preparó unas hojitas que por la noche repartía en las puertas de las casas. A esta inteligente estrategia apostólica, se suma también su obra Controversias, ejemplo de periodismo católico certero y astuto.