El pasado miércoles la Federación de Sanidad de CCOO realizaba la denuncia y un día después el consejero de Salud, José Ignacio Nieto, desmentía los hechos. Transcurridas otras 24 horas es otra federación, del mismo sindicato, en este caso la de Servicios Privados, la que da la razón al dirigente, contradiciendo a su propia organización. Los trapos sucios de la lavandería parecen haberse adentrado en los despachos.
Hablamos de las sábanas y ropa de cama tendidas en zonas poco salubres del hospital, fuera del circuito habitual de secado. Nieto aseguraba que todo se debía a una avería en las secadoras de la empresa concesionaria y que, todas esas sábanas que aparecían en las imágenes, en ningún caso iban a ser destinadas a las habitaciones del hospital sino para el servicio de limpieza. En esa misma línea apuntaba la Federación de Servicios Privados de CCOO.
Ante tal choque de posturas dentro del propio sindicato, lo único claro es que alguien está faltando a la verdad. Al parecer, esa nota emitida por los delegados sindicales de la empresa INDUSAL bajo el cuño de CCOO, responde a una sitaución de miedo y presiones ante la inminente finalización del contrato de gestión este mismo año. Hablan incluso de miedo ante su inminente renovación. Aseguran desde la Federación de Sanidad que les consta, incluso, “que los trabajadores fueron llamados a filas”.
Consideran además que, “aunque el consejero haya intentado esta maniobra” ante la evidencia de las fotografías y haya conseguido “enfrentar al propio sindicato”, ha quedado claro que no todo era mentira como decía en un principio, ya que reconoce que la secadora estaba estropeada y que la ropa había salido del circuito. Lo que significa reconocer también, destacan, que “el servicio no funciona correctamente”. En este sentido, señalan una vez más, que son numerosas las quejas que llegan desde diferentes servicios del hospital porque la ropa no está en perfecto estado. Ponen el acento en que el objetivo final de la Federación de Sanidad que “se ha conseguido, ya que al menos esas sábanas no volverán a ser usadas por los pacientes”.
Sin embargo, desde la Federación de Servicios Privados de CCOO siguen manteniendo su postura. “A mi me llaman mis delegadas sindicales muy enfadadas y me dicen que es totalmente falsa esa denuncia”, explica José Antonio Torres, delegado de FSP-CCOO, “que estas sábanas de las fotos son las que se destinan al servicio de limpieza o al de mantenimiento cuando están en desuso”.
Al parecer, según el testimonio de Torres, la propias trabajadoras de limpieza reconocen que fueron ellas las que las tendieron y manifiestan el temor a tener represalias, llegando incluso al despido, por haberlo hecho.
Respecto a las supuestas llamadas y presiones a las trabajadoras de lavandería ante la inminente renovación del contrato, Torres dice “no tener constancia”. “Yo escucho a mis afiliadas, creo por lo que he visto que es cierto lo que dicen y por eso adopto esta postura, aunque vaya en contra de mi propio sindicato”, concluye.