Los niños de entre 6 y 8 años transportan en sus mochilas un 7 por ciento más del peso recomendado, según ha mostrado un estudio realizado por fisioterapeutas españoles. De esta forma, la investigación desvela que el 28 por ciento de los padres asegura que su hijo menor de 8 años se ha quejado de dolor de espalda, de los cuales el 3 por ciento ha sido diagnosticado de dolencias de espalda por un médico, especialmente en la zona lumbar (55,6%) y cervical (44,4%).
Del mismo modo, el estudio ha puesto de manifiesto que el 50 por ciento de los padres cree que los hábitos posturales de sus hijos pueden provocarles futuras dolencias músculo-esqueléticas en un futuro, aunque reconocen que los pequeños cargan diariamente con una mochila que pesa unos 5 kilogramos.
Por esta razón, los expertos insisten en la importancia que tiene que los padres elijan para sus hijos una mochila adaptada al tamaño del material que vaya a transportar y a la altura del niño.
Además es preferible que se escojan aquellas que disponen de dos cintas anchas y acolchadas, a ser posible con otra cinta de sujeción para la cintura, y que tengan también acolchada la zona de contacto con la espalda.
Por otra parte, a la hora de organizarla, los facultativos recomiendan a los padres revisar que sus hijos sólo carguen con el material escolar que vayan a necesitar ese día, y evitar que lleven objetos innecesarios como juguetes o estuches de madera.
Deben de ayudar a sus hijos a organizar la mochila de manera que los libros de mayor tamaño queden colocados en la parte que entra en contacto con la espalda, y los más pequeños en la exterior. También es importante que el niño se acostumbre a colocarse la mochila, colgándosela desde la mesa, y no desde el suelo (para evitar torsiones de espalda), y que aprendan a regularse las correas de manera que la mochila quede justo por encima de la zona glúteo.