El Pleno del Congreso de los Diputados debatirá mañana una proposición de ley que pide reformar la Ley de Derechos y Libertades de los extranjeros en España, cuyo objetivo es apoyar a aquellas mujeres inmigrantes que son víctimas de violencia de género.
Soraya Sáenz de Santamaría, portavoz del Partido Popular (PP) en el Congreso, en una rueda de prensa explicó a los medios que esta reforma se tiene que concretar en dos pasos: mujeres en situación de irregularidad en España que puedan obtener una orden de protección y un permiso de residencia que les proteja de sus parejas y por otro lado, dar “especial” atención a las mujeres maltratadas que no siempre denuncian.
Esta reforma cuenta con el apoyo de algunas organizaciones que también habían propuesto esta petición, Amnistía Internacional , entre otras. “Hay un gran consenso entre la comunidad jurídica para apoyar a mujeres que no denuncian por encontrarse en una situación de irregularidad” afirma la portavoz del PP.
Además, la diputada también recuerda las cifras dramáticas del 2010 de mujeres asesinadas en manos de sus parejas y señala que en lo que va de año, ya se cuentan siete muertes de mujeres, entre las cuales, dos eran extranjeras que no habían denunciado. “Creo que nos obliga a todos a adoptar medidas para evitar esa situación y dar confianza a las mujeres a la hora de denunciar”, apostilló.
“Es una medida que espero que el resto de grupos apoyen, que viene siendo reclamada por la comunidad jurídica y también por las organizaciones de derechos humanos. Lo que se trata es que prevalezca la protección de la mujer frente a esa situación de malos tratos y que puedan obtener un permiso que las proteja frente a sus parejas en caso de violencia de género”, concluye la diputada del PP.
Denunciar es el camino
La secretaria de Estado, Bibiana Aído, insta a las víctimas de violencia de género, a su entorno y en definitiva a toda la sociedad a “denunciar y a no permanecer impasibles” frente a esta “lacra social”.
Aído, también anima a que las víctimas acudan a las organizaciones de mujeres y a los servicios sociales. “Hay que actuar frente a la violencia de género” manifiesta.
Por otro lado, reconoce que las instituciones tienen un importante papel a desarrollar en el tema. “Todos podemos hacer algo. Todos podemos poner nuestro granito de arena. No podemos permanecer callados cuando vemos cómo una compañera de trabajo o una amiga, una y otra vez dice que se ha tropezado con un mueble o ha resbalado en la bañera y sabemos que eso no es cierto”, insiste la secretaria.
Aído hace un balance doloroso de las víctimas mortales del 2010 pero también señala que, a día de hoy, ya son 95.000 las mujeres que forman parte de los programas de protección y que más de 5.000 maltratadores están en prisión.