Con la llegada del mes de septiembre llega la vuelta al cole, el final de las vacaciones y, en definitiva, la vuelta a la normalidad y la rutina. Una rutina en la que también entra el cambio de temporada. Y muchos aprovechan estos días también para cambiar las fundas de la cama, retirar la ropa y limpiar y dar la vuelta a los colchones.
Para todos aquellos que estén ahora mismo en estos quehaceres, la OCU aporta una serie de consejos para alargar la vida del colchón y mantenerlo limpio y en buenas condiciones durante más tiempo.
A la hora de lar la vuelta al colchón, la OCU recomienda prestar atención a las recomendaciones del fabricante. Y es que dependiendo del diseño núcleo, bastará con poner la parte de la cabeza en los pies, o bien será mejor dar la vuelta al colchón, poniendo arriba la cara que durante los meses anteriores ha estado abajo… o bien ambas cosas.
Los colchones que se pueden voltear tienen un núcleo simétrico y suelen distinguir una cara de verano con tejidos más frescos y mejor respiración, de otra de invierno más cálida y aislante.
Los colchones que se pueden rotar mantienen la misma estructura a todo lo largo del colchón, de la cabeza a los pies, sin zonas de refuerzo diferenciadas para hombros y caderas, o, si las hay, son zonas equivalentes, situadas en las mismas posiciones.
En cambio, hay colchones, que pueden ser de muelles o de espuma, que pueden presentar zonas diferenciadas y eso hay que tenerlo en cuenta.
Al menos se debe dar la vuelta al colchón un par de veces al año: de invierno a verano y de verano a invierno. Pero si lo prefieres, la frecuencia de volteo puede ser mayor: tu colchón y tu salud pueden salir ganando.
Si estás pensando en limpiar el colchón, la OCU recomienda, de entrada, usar siempre una funda lavable para proteger el colchón. No solo alargarás su vida, sino que lo mantendrás en mejores condiciones. Así, limpia el colchón con un cepillo de mano, es preferible a pasar el aspirador.
Para los qu utilicen un aspirador, el consejo de la OCU es poner a boquilla tipo cepillo de mano o, si la tiene, una boquilla especial para el colchón. Utiliza la velocidad más suave. El momento de dar la vuelta o rotar el colchón es una buena ocasión para aprovechar y hacerlo a conciencia: al estar canto te aseguras de que el polvo caerá fuera del colchón.
Asimismo, la OCU nos facilita un truco casero para limpiar el colchón consiste en espolvorear por encima del colchón bicarbonato sódico por su capacidad para neutralizar la acidez del sudor y su efecto desodorante. Después de espolvorearlo, déjalo actuar durante varias horas: después retíralo con un cepillo de mano o con el aspirador con la boquilla y velocidad suaves.
Y, aunque los fabricantes insisten en que se debería cambiar el colchón cada 8 años, lo cierto es que nuestros análisis demuestran que si te compras un buen colchón y lo cuidas bien, puedes disfrutarlo en condiciones óptimas al menos unos 10 años. Para ello, debes usar una base adecuada para cada tipo de colchón. Además es importante mantener el dormitorio libre de humedades. Los ambientes húmedos y cerrados favorecen el desarrollo de hongos.
Y si quieres cuidar bien el colchón, los expertos también recomiendan protegerlo con una funda transpirable y lavable. Y, cada día, antes de hacer la cama y sea cual sea la estación, ventila la habitación (al menos 10 minutos) y retira las sábanas, para que respire el colchón. Conviene además que dejes pasar un tiempo antes de hacer la cama de nuevo: el colchón necesita tiempo para evaporar toda la humedad que ha ido absorbiendo durante la noche.
Importante también es cambiar las sábanas cada semana y salvo que el fabricante lo desaconseje, dale la vuelta a tu colchón regularmente, al menos dos veces al año, colocando la cara que estaba abajo, arriba y girándolo de los pies a la cabeza.