Amigos de la Tierra ha denunciado el vertido de aguas pluviales y residuales, del colector procedente de Lardero, en el término de Villamediana, al río Iregua cuando este supera su capacidad, especialmente cuando se producen tormentas fuertes.
El colectivo ecologista señala que el lugar donde vierte al río se puede observar el impacto ocasionado sobre el medio ambiente: cientos de toallitas, tampones, trapos, y multitud de otros residuos sólidos son vertidos directamente al río, “dejando el lugar inhabitable para cualquier forma de vida (antes en ese lugar se observaban peces e invertebrados. Ahora no hay nada)”.
Explican además que en el fondo del lugar se observa durante todo el año un fango grisáceo. Además, esto hace que aguas abajo se observen residuos sólidos continuamente, con lo que ello conlleva para la fauna.
“Es cierto que estos vertidos no deberían ser arrojados al váter, y que eso es culpa de los ciudadanos. Pero tirados o no, no se puede permitir que este tipo de colectores viertan en un lugar como este”, señala Amigos de la Tierra.
El tramo del Iregua afectado por el vertido tiene presencia de visón europeo (Mustela lutreola), y posee una gran biodiversidad (peces, aves, mamíferos, etc.). También hay presencia confirmada de nutrias (Lutra lutra). “Es algo que no se puede permitir, teniendo en cuenta el pésimo estado en que se encuentran las riberas de los ríos riojanos en general”. Este tramo del Iregua bajo a su paso por Villamediana es uno de los pocos que se encontraba en muy buen estado, “se está recuperando con el paso de los años, pero estos vertidos pueden dar al traste este proceso de recuperación del ecosistema de ribera”.
El colectivo ecologista considera que, se elimine este punto o no, “sería fácil impedir que tales residuos llegaran directamente al río, mediante algún tipo de red o rejilla, que podría comprobarse y vaciarse periodicamente. Esta medida ya se ha adoptado en muchos países europeos”.