Un mar lavanda se extiende en el Paraje de Ordoyo, en el término municipal de Quel, llenando de olor y color este enclave de La Rioja Baja. Fue hace tres años cuando Chema Ayensa y Enrique Extremiana decidieron embarcarse en la aventura de hacer un campo experimental de seis hectáreas de este cultivo, que forma parte de la red de proyectos enmarcados en las ayudas del Programa de Desarrollo Rural, destinadas a actividades de divulgación y demostración práctica de nuevas técnicas y prácticas de producción para mejorar la competitividad agraria en La Rioja.
“Gracias a su buen trabajo se está llevando a cabo un buen desarrollo y lo ha ampliado hasta las 20 hectáreas”, ha puesto en valor la consejera de Agricultura, Ganadería, Mundo Rural y Medio Ambiente del Gobierno de La Rioja, Noemí Manzanos, en una visita al lugar este lunes junto a la directora general de Agricultura y Ganadería, María Jesús Miñana.
El Gobierno de La Rioja, como ha explicado Manzanos, viene implementando en la comunidad campos demostrativos desde 2007. “Se han tocado la inmensa mayoría de los cultivos que pueden ser interesantes para que podamos diversificar, para que La Rioja, dentro de la gran suerte que tenemos con nuestros suelos, nuestra climatología y nuestro capital humano de nuestros agricultores y pueblos podamos continuar diversificando nuestra economía y siendo una parte importante para el desarrollo rural y para el desarrollo y la vida de nuestros pueblos”.
Así, el Ejecutivo regional financia durante 5 años la implantación de las primeras seis hectáreas y los costos del cultivo de los primeros años. En cuanto a los resultados de este campo, Manzanos ha explicado que este será el primer año en el que se cosecharán estas lavandas y será el aceite de estas el producto que se comercialice.
Se tratarían de aceites esenciales que se utilizarían fundamentalmente, como han detallado desde el Ejecutivo regional, en farmacia o cosmética. Por delante queda el reto de la destilación, que este año se llevará a cabo con un equipo movil.
Ayensa ha explicado que el nacimiento de esta idea surge de una visita con su socio a Guadalajara, a la zona de Brihuega. “Ha sido un año con bastantes sequías y, sin embargo, el comportamiento ha sido bueno, la producción esperamos que sea relativamente buena y la idea es seguir ampliando”, ha hecho balance. “Ahora nos falta tener una pequeña planta móvil de destilación para que podamos ser tractor en la zona por si alguien más se anima a hacer plantación”, ha valorado sobre la destilación, el más complejo del proceso.
En cuanto las expectativas de implantación de este cultivo, este emprendedor ha valorado que se ha adaptado “muy bien a pesar de ser secano”. “Creo que puede funcionar bien con el tipo de precipitaciones que tiene La Rioja”. Además, “se adapta bien a muchos tipos de tierra”, requiriendo “cierta altura”. Así, el paraje de Ordoyo se encuentra a unos 800 metros, siendo necesarios, como ha detallado, entre los 500 y 1200 metros para un buen desarrollo.
El balance de adaptación al clima y al terreno de este cultivo por parte de la Consejería también es positivo, como ha señalado Miñana. “El cultivo se implantó en el 2020 y el 23 ya estaría en producción”, ha puesto en valor.
En cuanto a la creación de estos campos demostrativos Miñana ha señalado que es una “iniciativa buena”, que “puede ayudar de una forma complementaria y puede ser alternativa a los cultivos tradicionales de la zona”. Asimismo, ha destacado la labor de divulgación de estos campos al resto de agricultores, a través de jornadas de difusión y la elaboración de una memoria a los cinco años que se pondrá a disposición de otros agricultores.
La directora general ha celebrado que, durante estas semanas de plena floración de la lavanda, se ha visto afluencia de personas interesadas en acercarse a la zona, por lo que ha recalcado el complemento de atractivo turístico que este campo puede dar a la zona.
El proyecto está respaldado por las ayudas a campos demostrativos, por concurrencia competitiva, que se subvencionan con el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER), para impulsar la transferencia de conocimientos y la innovación en la agricultura y las zonas rurales, mejorar la competitividad de todos los tipos de agricultura y aumentar la viabilidad de las explotaciones, y son cofinanciadas por la Unión Europea, el Ministerio de Agricultura, y la Consejería de Agricultura, Ganadería, Mundo Rural y Medio Ambiente, a través del Programa de Desarrollo Rural de La Rioja.
La plantación realizada en el paraje de ‘Ordoyo’ desde su origen en 2020, y hasta 2024, cuenta con una subvención de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Mundo Rural y Medio Ambiente por un importe total de 47.635 euros. Con esta iniciativa se apoya una alternativa real a cultivos extensivos de la zona, generando una diversificación de cultivos.
Asimismo, a tenor de la buena acogida de este tipo de campos, se han ampliado las opciones de ayuda, con partidas como el Plan Estratégico de la PAC (PEPAC) 2023-2027. Dicho plan cuenta con una intervención regional en La Rioja para apoyar este tipo de iniciativas, con una ficha presupuestaria de 1,25 millones de euros para los próximos 5 años, que se concederán previa convocatoria a través del procedimiento de concurrencia competitiva.