Dos días se ha mantenido en pie el memorial alternativo de la cárcel de Carabanchel. Esta mañana, miembros de la Plataforma Salvemos Carabanchel se han encontrado con que el memorial de aluminio que colgaron el sábado al mediodía ya no estaba. Ni rastro de los tres paneles de aluminio, ni de las bridas, que eran metálicas para evitar que se pudiera dañar con unas simples tijeras.
“No sabemos quién ha sido. Estamos muy desconcertados”, explica Jesús Rodríguez, miembro de la plataforma. La organización trabaja con tres hipótesis: que haya sido un ataque ultra, que lo haya desmontado el propio Ayuntamiento o que lo hayan robado chatarreros. “Si hubiera sido un ataque de ultras, habrían quitado también la pancarta grande en la que pone ‘aquí estuvo la cárcel de Carabanchel’, y tampoco han atacado la maqueta”, comenta Rodríguez. Fuentes del área de Obras del Ayuntamiento de Madrid aseguran que la retirada no la han efectuado operarios municipales y vinculan lo ocurrido a un “acto vandálico”.
Los miembros de la plataforma se reunirán esta tarde para decidir los pasos a seguir. “Van a llamar a la Junta Municipal para ver si los servicios del Ayuntamiento han ordenado retirarlas. El sábado, antes de las 11, pasó una patrulla de la Policía municipal para pedirnos unos papeles”, ha recordado el miembro de la plataforma.
“Ha tenido que ser desde dentro del recinto, a lo mejor ha sido alguien que ha ido a robar el material. Han quitado hasta las bridas”, lamenta. Las tres placas de aluminio con el nombre de unas 700 personas que estuvieron presas en el penal tuvo un coste de unos 300 euros, cantidad que se logró con la venta de chapas y otros objetos, después de que Almeida frenase la construcción de una instalación aprobada durante el mandato de Carmena.
El memorial instalado el sábado era un proyecto alternativo ideado por la plataforma que consistía en tres placas de aluminio con el nombre de 700 personas que estuvieron presas por sus ideas políticas o su orientación sexual durante el franquismo. La idea era que la instalación siguiera ampliándose a medida que fuesen logrando más financiación colaborativa.
Sin embargo, dos días después del undécimo aniversario del derribo de la cárcel, la valla del antiguo penal ha amanecido así. La Plataforma Ciudadana por el Centro de la Memoria Cárcel de Carabanchel se ha quedado “sin palabras” mientras que en Más Madrid la concejala Esther Gómez ha lamentado que este acto vandálico “sea la tolerancia a la recuperación de la memoria de los que fueron encarcelados en Carabanchel durante la dictadura” porque “así no se construye ciudad ni democracia”.
La edil de Más Madrid Estrella Sánchez, también presente en el acto del sábado, ha lamentado lo sucedido después de todo el “esfuerzo de vecinos y colectivos de memoria”. “Es una gran falta de respeto y prueba de que esta democracia y esta Constitución que hoy estamos celebrando en la Puerta del Sol todavía le queda mucho camino. No sabemos respetar los deseos de todas las partes. Parece que una parte tiene que estar siempre olvidada y escondida. Es una triste pena pero seguiremos trabajando y recabando fondos para colocar esas placas. Por justicia y memoria”, ha declarado la edil.
El memorial era la respuesta ciudadana al 'no' del actual Gobierno municipal: la antigua cárcel de Carabanchel se queda sin el memorial acordado por el Comisionado de la Memoria Histórica, compuesto por representantes de todas las formaciones políticas en la pasada legislatura, después de que la Inversión Financieramente Sostenible (IFS) para erigirlo haya caído del proyecto de presupuestos.
El concejal socialista, Ramón Silva, que también estuvo presente el sábado pasado en el acto, ha lamentado vía Twitter lo sucedido: “Han arrancado los paneles con los nombres de los presos políticos, homosexuales... que penaron en la #CárcelDeCarabanchel después de que Almeida y Villacís arrancaran los nombres de las víctimas del franquismo en la Almudena”, ha protestado Silva.