La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, no se reunirá con Pedro Sánchez en la Moncloa, según ha comunicado este lunes su gabinete. “El deterioro institucional al que se está sometiendo a España no puede pasarse por alto”, asegura el equipo de la dirigente autonómica del PP en un comunicado, después de que Sánchez la hubiera convocado para este viernes, 25 de octubre. Un encuentro enmarcado en una ronda de reuniones bilaterales con los presidentes autonómicos con el foco puesto en la financiación autonómica tras las quejas por el concierto económico para Catalunya y con otros asuntos encima de la mesa como inmigración, infraestructuras, inversiones o el debate territorial.
Con esta decisión, la presidenta madrileña desoye al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que abogó en una entrevista en El Mundo por asistir a los encuentros bilaterales con el presidente de Gobierno. “Si un presidente autonómico no acude al Palacio de la Moncloa, creo que comete un error”, apuntó el líder popular, que sostuvo él asistió a todas las reuniones que tuvo como presidente gallego, quien dijo que pensaba que Ayuso acudiría a la cita.
Feijóo planteó además la importancia de estas reuniones para abordar diferentes temas autonómicos, en el caso de Madrid, destacó la situación de los Cercanías o de “la inmigración”, e insistió en que “la presidenta Ayuso sabe muy bien que su responsabilidad es defender los intereses de los madrileños y practicar una política de Estado, y eso es lo que ha venido haciendo siempre”.
Fuentes de la dirección nacional del PP han asegurado a elDiario.es que Ayuso avisó ayer domingo a Feijóo de sus intenciones, y que este se mostró “comprensivo” con la presidenta madrileña. Desde Génova lamentan que mientras “el presidente del Gobierno no pide la dimisión del fiscal general del Estado, imputado por perseguir a Ayuso”, Sánchez “la ha llamado corrupta a ella que no está imputada por nada”.
“Feijóo mantiene todo lo que dijo, pero es comprensivo con las motivaciones de Isabel”, zanjan las mismas fuentes. Es decir, Feijóo considera un “error” la decisión de Ayuso.
Ayuso justifica su negativa asegurando que este encuentro “se celebra en el marco de una ronda de reuniones posteriores a la negociación de la ruptura de la Hacienda común de todos los españoles con los socios independentistas del Gobierno. Un pacto que va a ser letal para el Estado de Derecho, la unidad de España y la solidaridad entre regiones”.
“Por tanto, no puede darse por válida esta decisión a hechos consumados que nunca se ha consultado ni con los presidentes autonómicos ni con el pueblo español en programa electoral alguno. No se puede normalizar lo que no lo es”, asegura el Gobierno madrileño en un comunicado emitido este lunes donde se recogen los motivos por los que Ayuso ha declinado asistir esta cita. Y añaden: “Desde las pasadas Elecciones Generales se están tomando una serie de decisiones destructivas cuyos efectos negativos tardarán mucho en revertirse”. Teniendo en cuenta los motivos expuestos desde la sede del Gobierno madrileño, Ayuso ha optado por no cancelar su agenda y continuar con el evento que desde hace semanas tenía convocado el viernes en Porriño, Galicia, con varias instituciones más.
Por otro lado, desde la sede el Ejecutivo madrileño aseguran que “menos de 24 horas antes de la convocatoria de La Moncloa, el presidente del Gobierno difamó a la presidenta en viaje oficial a Bruselas, con unas gravísimas acusaciones que iban en la misma línea que su intervención, el día anterior, en el Congreso de los Diputados”.
“Los ministros han recibido la orden de repetirlas durante las últimas horas, en una campaña inaceptable e impropia de un Gobierno contra una administración inferior. Esta situación tampoco se había vivido nunca”, indican. Con todo, el equipo de la presidenta insiste en asegurar que “el deterioro institucional al que se está sometiendo a España no puede pasarse por alto”.
Las declaraciones de Sánchez en la Cámara Baja apelaban directamente a la corrupción del PP. El presidente aseguró que la corrupción del PP va de la “a de Ayuso a la zeta de Zaplana”. Al hilo de esa interpelación, la presidenta replicó horas después en la Asamblea de Madrid que no es “la a de Ábalos a la zeta de Zapatero”, sino la “be de Berni, de Barrabés y de Begoña”. La esposa del presidente es “otra que va pa’lante”, lanzó, empleando la misma expresión informal que Miguel Ángel Rodríguez, su jefe de gabinete, usó para anunciar con una semana de adelanto la imputación del Fiscal General del Estado.
Desde el Gobierno central defienden que “Ayuso representa la peor política”, ha asegurado Óscar López, ministro para la Transformación Digital, en TVE minutos después de que se haya conocido esta noticia. En esta misma línea, ha apuntado que la presidenta autonómica ha convertido “la Comunidad de Madrid en el epicentro del fango y la corrupción” y lamenta que sea la “representa española de la ola ultra que invade el mundo entero”. “Esa es la peor política posible. La que rompe los puentes una vez más es ella”, ha insistido, informa José Enrique Monrosi.
La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, también ha reaccionado a este anuncio. Ha acusado a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, de incumplir la Constitución con su decisión de ausentarse del evento programado por La Moncloa. “Las presidencias de las administraciones autonómicas deben rendir cuentas ante su ciudadanía. Hay un principio constitucional de diálogo entre administraciones. Me gustaría que la presidenta cumpla con sus mandatos constitucionales. Es evidente que no lo está haciendo”, ha dicho en declaraciones a los medios antes de entrar a un desayuno informativo con el secretario general de CCOO, Unai Sordo, informa Alberto Ortiz.
Sémper: “Yo hubiera ido”
El portavoz del PP, Borja Sémper, ha asegurado este lunes en Antena 3 que él sí hubiera asistido a la reunión. “Nosotros somos un partido institucional y el paradigma de la institucionalidad es Alberto Núñez Feijóo, un hombre que respeta la norma, la forma y que además cree en esa institucionalidad que hay que preservarla. Y eso es lo que seguimos pensando”.
Pero Sémper ha dicho que entienden a Ayuso y su decisión. “Nos engañaríamos si pensáramos que la relación entre Isabel Díaz Ayuso y el presidente del Gobierno es una relación convencional y la relación entre el Gobierno de Madrid y el Gobierno de España es una relación convencional”, ha asegurado. “Si el Gobierno insulta y acusa de un delito cuando no hay ninguna sustancia para ni siquiera aventurarlo y habla de su pareja como delincuente confeso. ¿Qué es esto?”, se ha cuestionado. La pareja de Ayuso, Alberto González Amador, reconoció por escrito haber cometido delitos contra la Hacienda Pública.
“Hace 48 horas, el presidente del Gobierno llamó corrupta a Díaz Ayuso. Podemos entender que esa relación institucional esté absolutamente rota. Y podemos también, y esta es nuestra opinión, llegar a la conclusión de que esto no es responsabilidad de la presidenta de la Comunidad de Madrid, sino del presidente del Gobierno”, ha añadido. “Yo hubiera ido a esa reunión para decirle al presidente de Gobierno esto a la cara”, ha zanjado.