Ayuso ganaría las elecciones pero se desinfla en las encuestas tras su polémica gestión en verano: de 57 escaños a 39 en cuatro meses

Fátima Caballero

14 de septiembre de 2020 07:01 h

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La polémica gestión de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, durante el verano sin el paraguas del estado de alarma empieza a pasarle factura. En una encuesta de NC Report que publica este lunes La Razón, el Partido Popular pierde en ese tiempo casi 20 escaños con respecto a un sondeo publicado por GAD3 para ABC el 2 de mayo: la presidenta de Madrid obtendría si hubiera unas elecciones hoy 39 escaños –actualmente tiene 30 diputados– mientras que hace cuatro la estimación era de 57.

No son buenas noticias para la presidenta madrileña en su primer Debate del Estado de la región. En mayo, con esos estudios demoscópicos que le daban una holgada mayoría –aunque sin mayoría absoluta–, Díaz Ayuso intentó un adelanto electoral y tuvo que ser el líder del PP, Pablo Casado, quien frenara una decisión que ya estaba tomada por la presidenta madrileña, según fuentes conocedoras de esos planes. Esta semana esas intenciones por parte de la presidenta madrileña han vuelto a estar sobre la mesa después de que el secretario general de los socialistas madrileños y Delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco, plantease como hipótesis, pero como una opción real– entregar la presidencia de Madrid a Ciudadanos para echar al PP del gobierno regional.

La encuesta que publica este lunes La Razón, sin embargo, supone buenas noticias para Ciudadanos. El vicepresidente del Gobierno regional, Ignacio Aguado, obtendría 19 escaños –actualmente su grupo parlamentario tiene 26– y se recuperaría de la caída que venía arrastrando en los últimos sondeos: si en mayo NC Report otorgaba a la formación de Inés Arrimadas en Madrid 10 escaños, hoy casi doblarían esa previsión. El vicepresidente madrileño ha protagonizado los últimos meses una estrategia contraria a la de Ayuso que ha apostado por la confrontación con el Gobierno central y la oposición. Aguado ha basado su discurso en el diálogo y la cooperación entre administraciones. Además las consejerías cuya gestión ha sido más polémica durante el verano, Sanidad y Educación, están dirigidas por el PP.

También se recupera de la caída en las últimas encuestas Más Madrid, que con el impulso de la portavoz adjunta y de Sanidad, Mónica García, ha frenado y mejorado la caída en las encuestas tras el resultado de Más País en las generales –con dos escaños– y la salida de Manuela Carmena del proyecto. Más Madrid obtendría hoy, según NC Report, 17 escaños –actualmente tiene 20– lejos de los 9 que le daba en mayo.

El PSOE no se mueve de los 37 escaños que tiene ya hoy y que mantendría, al igual que ocurría en la encuesta de mayo. También Unidas Podemos-IU repetiría un resultado similar al de las elecciones de 2019 y el sondeo anterior: sumaría un escaño más a los 7 que tiene actualmente. En el caso de Vox, obtendrían hoy 12 escaños, uno menos que los que tiene actualmente pero dos más que el sondeo de mayo.

Los resultados de esta encuesta que llegan en uno de los días más importantes de la presidenta autonómica en la Asamblea de Madrid porque hace balance de su primer año de gestión en el debate del Estado de la región enfrían sus expectativas y sus deseos de un adelanto electoral ante las pésimas relaciones con su socio de Gobierno, Ciudadanos.

Madrid lidera las cifras de contagios por el virus y el Ejecutivo de Ayuso es una sucesión de improvisaciones y anuncios de los que una parte de la coalición se entera por la prensa. La región concentra desde las últimas dos semanas más de un tercio de todo lo que se está diagnosticando a nivel nacional. Sanidad notificó este viernes 12.183 casos, de los que 4.195 pertenecen a la Comunidad de Madrid. Las hospitalizaciones semanales tampoco han dejado de multiplicarse desde principios de agosto, y aunque la región está lejos de la situación asistencial que tenía en los peores meses de la pandemia cuando la sanidad colapsó, la ocupación solo de pacientes Covid ronda el 60%, unas cifras “preocupantes” para sanitarios y Gobierno.