Tres Cantos se abre ahora a permitir la acogida de migrantes en el colegio Palacio Valdés

El proyecto de acogida de migrantes en el antiguo colegio Palacio Valdés en Tres Cantos, propiedad del Ayuntamiento de Madrid, está más cerca. El Gobierno municipal, en manos del PP, se ha abierto a aceptar un proyecto siempre que el Consistorio de Manuela Carmena o el Ejecutivo central declaren una situación de emergencia, lo que permitiría modificar el uso que tienen en la actualidad la finca y el edificio.

Desde que Carmena anunciara a mediados de agosto su intención de usar el colegio, la iniciativa ha dado bandazos con declaraciones cruzadas entre el Consistorio de la capital y el del municipio madrileño. 

El equipo de Gobierno tricantino ha sostenido desde del principio que la acogida solo se llevaría a cabo si cumplía con la legalidad. El Plan General de Ordenación Urbana contempla esta parcela con un uso de parque público y complementario educativo, lo que vetaba cualquier opción.

Desde la oposición, el PSOE ha mantenido que sería posible “pedir el uso educativo que se puede complementar como alojamiento” y recordaban que este edificio, antiguo Colegio de la Paloma, “funcionó como residencia de niñas”.  

Los conservadores rechazaron esta opción: “Es inviable legalmente, no se permite el alojamiento comunitario”.

Javier Juárez, primer teniente de alcalde de Tres Cantos, afirma ahora que “tras estudiar todas las posibilidades” solo se contemplan dos vías. “Un acuerdo del Consejo de Ministros para que se conceda un uso para este inmueble que no está permitido” por tratarse de una situación de emergencia o a través de un “decreto de alcaldía” del Consistorio de Carmena.

Juárez confirma que ambas administraciones lo están estudiando. Además, el equipo de Gobierno local se reunirá con la secretaria de Estado de Migraciones próximanente para tratar este asunto.

El PP de la localidad culpa al Ayuntamiento de Madrid de ralentizar el proceso. “Podíamos haber adelantado y podía haber sido más ágil y fructífero si Madrid se hubiera puesto en contacto con Tres Cantos desde el principio”, apunta Juárez.

El equipo de Ahora Madrid rechaza hacer declaraciones mientras duren las negociaciones. 

¿Cambio de postura del PP?

Tanto el grupo municipal socialista, como Ganemos Tres Cantos y la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) que gestiona el proyecto, ven claramente un giro de 360º por parte del equipo de Gobierno dirigido por Jesús Moreno. 

El PP “ha ido cambiado su postura y ahora va a facilitar el proyecto” consecuencia de “la presión en la calle y la recogida de firmas” puesta en marcha por parte de los vecinos de la localidad en change.org y que ya lleva más de 4.000, ha declarado Federico Mas, portavoz adjunto de Ganemos Tres Cantos.

Paco Garrido, coordinador territorial de CEAR en Madrid cree que el discurso de los conservadores es ahora “más sosegado, se ha impuesto la coherencia” y asegura que el Ayuntamiento “conocía el proyecto al detalle” desde que Carmena lo anunció públicamente. Garrido afirma que en ningún momento iban a aceptar una situación “que no cumpliera la normativa” y cree que ha habido “precipitación en algunas afirmaciones”.

Juárez lo niega y valora positivamente el proyecto, pionero en España, y lo califica como “prioritario” para el Ayuntamiento. El PP tricantino no ha ocultado nunca estar “molesto” con la alcaldesa de Madrid por anunciar la iniciativa sin haberse puesto en contacto con ellos primero. Postura a la que se suma la portavoz del grupo de Ciudadanos, Araceli Gómez: “El Ayuntamiento de Madrid no puede hacer nada en Tres Cantos sin el visto bueno de las autoridades del municipio”.

La corporación municipal al completo, tras reunirse esta semana con la Confederación Española de Ayuda al Refugiado, muestra ahora una postura unánime y está de acuerdo en la acogida en el municipio. 

Un centro especializado en mujeres y niños 

El proyecto presentado por CEAR plantea un Centro de Atención de Emergencia y Derivación, de los que habrá hasta un total de cuatro en toda España, alguno gestionado también por Cruz Roja.  

Hasta ahora “las personas llegaban a las costas españolas donde la policía les identificaba y se les trasladaba a los CIE o se les dejaba en libertad sin ningún tipo de información o intinerario claro para su proceso de inclusión en España”. Un grupo de unas 15-20 personas, además de los voluntarios, trabajará con los migrantes “para realizarles un análisis sanitario y psicológico completo y recibirán información de sus derechos y obligaciones”, explica Garrido para, posteriormente, ser derivados.

El perfil mayoritario será el de mujeres y familias monoparentales, “será un centro especializado en este perfil” y hay cabida para la acogida de hasta 80 personas. La estancia se calcula de las dos a las cuatro semanas, pudiendo ser inferior o superior, según las necesidades, y el proyecto estará vigente, de momento, hasta julio de 2019.

Predisposición vecinal

CEAR mantuvo un encuentro con los ciudadanos esta semana para explicar los pormenores de la iniciativa, una cita a la que acudieron cerca de 200 personas. Garrido ha opinado que la actitud de los vecinos ha sido ejemplar. “Me parece un ejercicio de madurez y responsabilidad ciudadana” el apoyo que han manifestado. 

“Muchas personas preguntaron cómo se podía ayudar” añade Lydia Martínez, portavoz del grupo socialista.