Carta de Carlos Sánchez Mato a la militancia de IU Madrid
Buenos días compañeras y compañeros:
Mi compañero Mauricio Valiente se retiró el pasado martes de la de la candidatura al Ayuntamiento de Madrid, un paso que respeto desde el cariño que siento hacia él. Se me ha animado a sustituirle y he decidido aceptar si se dan unas condiciones mínimas que os hago llegar.
Llego hasta aquí con la humildad que supone un mandato duro. Creo que también con la coherencia de haber trabajado por la mayoría social por delante de cualquier apego al sillón. No ha sido fácil defender el programa y la unidad popular que nos llevó al gobierno de la ciudad de Madrid en 2015 y la lucha contra la corrupción. No sale gratis pelear a favor de la mayoría social.
Pero merece la pena.
El feminismo, del que tanto me queda por aprender, me ha enseñado también a reconocerme vulnerable. Por eso para aceptar no tengo empacho alguno en reconocer que necesito el apoyo de mi organización, Izquierda Unida.
Nuestra organización ha apostado, con el apoyo mayoritario de nuestra militancia, por los procesos de confluencia para este ciclo electoral.Y esa ha sido mi opción por la profunda convicción de que la unidad popular, más allá de las elecciones, es el único camino para defender a la clase trabajadora.
Lo que ha salido adelante en el referéndum de IU Madrid no es la opción que yo defendí. Como bien sabéis, aposté por el acuerdo con las compañeras y compañeros de Podemos. Formar parte de una organización supone asumir las decisiones colectivas como propias y colocarse donde la militancia decide.
En mi opinión eso nos obliga a seguir trabajando para que haya una confluencia lo más amplia posible en el breve plazo que resta para evitar que nuestra base social se encuentre el día 26 de mayo con tres opciones a elegir a la izquierda del PSOE.
Los elementos que considero mínimos para poder ser respetuoso con los resultados del referéndum y con la opción que ha apoyado de manera mayoritaria nuestra gente a nivel federal son los siguientes:
1) Es imprescindible agotar las vías que puedan aún explorarse para llegar a un acuerdo con Podemos. Sin más apriorismos que los que como organización estamos defendiendo de manera pública a la hora de llegar a pactos con otras formaciones políticas.
2) Si existiera alguna posibilidad, deberá ser comunicada a nuestras Asambleas para que pueda ser conocida por nuestra militancia y evaluada en consecuencia.
3) En caso de que no pudiera alcanzarse el acuerdo con Podemos, estaríamos ante un escenario no deseado que obligaría a actuaciones muy concretas en el ámbito de las campañas electorales que no supongan un obstáculo para alcanzar el objetivo de tener representación en el Ayuntamiento de Madrid.
-Campaña con perfil propio en la ciudad de Madrid: Es evidente que, al no competir con Podemos en la misma, su electorado es, en gran parte, objetivo de nuestra candidatura. Atraerlo precisa de un mensaje diferenciado muy claro con Más Madrid, algo sencillo porque IU Madrid Ciudad ha sembrado durante estos años una línea programática reconocible y aceptada por colectivos y aliados de la ciudad.
-Por ese motivo, la candidatura del Ayuntamiento debería ser una coalición con Bancada y Anticapitalistas con denominación propia para atraer el voto de Podemos en la ciudad. Lógicamente si hubiese un acuerdo con podemos en la comunidad la candidatura debería usar la denominación de “Unidas”.
-Aprobación de este marco en la Coordinadora (o Asamblea de Madrid Ciudad)
-Respeto a las primarias realizadas para el resto de la candidatura que ha sido elegida por nuestra militancia.
Demasiado tiempo hemos dedicado a cuestiones internas.
Creo que los vecinos y vecinas de Madrid nos reclaman, con toda la razón, que trabajemos por un modelo de ciudad en el que todos y todas tengamos vidas dignas, en el que superemos los enormes desequilibrios que siguen existiendo e invirtamos hasta el último céntimo en proyectos que beneficien a la mayoría social. Hay que garantizar el derecho a la vivienda, que podamos respirar aire limpio y que las mujeres vivan en libertad de día y de noche. Porque en Madrid sigue habiendo desahucios, pelotazos urbanísticos, violencias machistas y la esperanza de vida depende del barrio en el que vivimos.
Pero eso puede cambiar.
Muchas personas que llevan trabajando meses para poner en marcha un proyecto con el que me siento plenamente identificado.
Me comprometo a defenderlo con ilusión y en común