Madrid cumplirá con la ley de Memoria Histórica en su callejero diez años después. El Ayuntamiento de Madrid aprueba este jueves en Junta de Gobierno la nueva edición especial del Callejero oficial, cerrado a 15 de mayo de 2017, junto con la edición anual a 31 de diciembre de 2016, del que desaparecen los nombres franquistas.
En esta edición especial, se incluye lo aprobado en el pleno extraordinario el pasado 28 de abril, cuando los votos favorables de Ahora Madrid, PSOE y Ciudadanos dieron luz verde al cambio de 52 calles y lugares con nombres franquistas, quedando ratificado así el informe del Comisionado de Memoria Histórica, presidido por Francisca Sauquillo. Las nuevas denominaciones recuperan el nombre anterior de las calles o rinden homenaje a mujeres ilustres e instituciones pedagógicas, entre otras.
Los rótulos de las calles afectadas llevarán los nuevos nombres a finales de junio, siguiendo con el calendario previsto por el Gobierno local. Antes, como ha informado la portavoz municipal, Rita Maestre, la corporación pondrá en marcha una campaña para informar a los vecinos y comerciantes que se vean afectados por esos cambios.
Estos cambios en el Callejero oficial de la capital cerrados el 15 de mayo se incluyen a los que ya se aprobaron el 31 de diciembre de 2016. En esa edición se cubrió el vacío de los 34 años transcurrido desde la aprobación de la última guía municipal, editada en 1982.
A día de hoy, con el nuevo callejero, el número de viales en la capital asciende a 9.146. Además de las que cambian para cumplir con la ley de Memoria Histórica de 2007 destacan algunas más, como las nuevas calles dedicadas a Pedro Zerolo, Alfredo Di Stefano, la glorieta de Lucrecia Pérez Matos o la plaza de Arturo Barea. En cuanto al número de direcciones vigentes, la ciudad cuenta actualmente con un total de 204.430.
El Callejero se elabora y actualiza por el Área de Desarrollo Urbano Sostenible a través de la Dirección General de Planeamiento y Gestión Urbanística. Desde la última actualización a finales de 2016, se tramita y edita de forma totalmente electrónica. Cualquier ciudadano puede acceder a él a través de la página web municipal y el portal de datos abiertos.