El Ayuntamiento de José Luis Martínez-Almeida ha decidido paralizar la retirada de patinetes en Madrid hasta la pronunciación del juez, aunque seguirá sancionando, después de que la empresa Lime haya solicitado medidas cautelares frente a la decisión de revocar las licencias.
“Hasta que el juez se pronuncie (en los próximos días), el Ayuntamiento de Madrid paraliza desde hoy la retirada de patinetes de la ciudad”, han informado este jueves fuentes del área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad según recoge Europa Press.
El Ayuntamiento sí continuará sancionando por estacionamiento indebido. Desde el Consistorio indican que hasta hoy se han retirado y sancionado 250 de estos aparatos. Cada multa por incumplir la Ordenanza de Movilidad se eleva a 1.500 euros, lo que supone que actualmente el equipo de Almeida ha impuesto 375.000 euros de sanción a ambas compañías
El alcalde de la capital informó de que su Ejecutivo iba a revocar la autorización para los 6.000 patinetes de tres empresas (Lime, Dott y Tier), que hasta entonces podían circular por sus calles, al considerar que no se está cumpliendo con las condiciones acordadas. Después de los 15 días hábiles otorgados por el Ayuntamiento para llevarla a cabo, la retirada entró en vigor el pasado viernes 25 de octubre, aunque Lime y Dott decidieron mantener sus aparatos operativos en la ciudad (como puede comprobarse en las propias aplicaciones de las plataformas).
Almeida trasladó que su Gobierno ha constatado que a lo largo de estos meses no se ha producido el cumplimiento de los condicionantes acordados y “sigue habiendo riesgos como consecuencia de la circulación de estos patinetes”. Señaló que no tienen la tecnología necesaria o existe un desconocimiento de los usuarios de las normas que tienen que seguir en la ciudad. “Por tanto entendemos que no se dan las condiciones para que estas empresas puedan seguir operando en estas condiciones”, añadió.
Lime celebra la decisión después de sus multas por incumplir la Ordenanza
Lime ha celebrado este jueves en un comunicado que se paralice la retirada de patinetes de forma temporal y ha criticado la decisión municipal al creer que es “unilateral y prematura”. La empresa ha subrayado que está llevando a cabo su labor “en cumplimiento estricto de la legalidad durante todo el proceso de revocación”, iniciado el pasado mes de septiembre.
La compañía considera que esta decisión beneficia a todos los ciudadanos de Madrid, que podrán seguir utilizando un medio de transporte “sostenible y seguro”. Lime lamenta “profundamente” que el Ayuntamiento “no haya tenido en consideración la visión de las empresas operadoras en ningún momento en este proceso de decisión, ni tampoco de la ciudadanía que usa estos patinetes”.