La portada de mañana
Acceder
Sánchez rearma la mayoría de Gobierno el día que Feijóo pide una moción de censura
Miguel esprinta para reabrir su inmobiliaria en Catarroja, Nacho cierra su panadería
Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

Almeida prepara un Madrid de grandes eventos deportivos, sin reparar en gastos y con los Juegos Olímpicos como objetivo

Diego Casado

Madrid —
11 de febrero de 2024 21:59 h

0

La capital de España vuelve al juego olímpico. Los primeros meses de legislatura han venido acompañados de numerosos anuncios sobre eventos deportivos de nivel internacional, que buscan posicionar a la ciudad en el mapa. “Vamos a hacer todos los esfuerzos para que Madrid sea una de las grandes capitales mundiales del deporte”, aseguraba este viernes durante un evento con un equipo internacional el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, confirmando el camino a seguir por su equipo.

Almeida lo decía poco antes de que la NFL, la liga profesional de fútbol americano, anunciara que celebrará un partido oficial en el Santiago Bernabéu. Una de sus franquicias, la de los Bears de Chicago, abrirá escuela en Madrid el próximo mes de septiembre, como parte de una apuesta por el “deporte base” que el alcalde quiere visibilizar a la vez que llegan los grandes eventos.

Hace unos días también comunicó que la capital acogerá la entrega de los premios Laureus –conocidos como los Oscar del Deporte– en una ceremonia que tendrá lugar en la galería de cristal del propio Ayuntamiento. Aunque el anuncio de mayor calado tuvo lugar a finales de enero, cuando se confirmó el desembarco de la Fórmula 1 a partir del año 2026, con un circuito urbano alrededor de Ifema. Antes llegarán más eventos, dijo la portavoz municipal, Inma Sanz, el pasado jueves: “Madrid está en racha, vamos a tener más buenas noticias en breve”, aseguró mientras los medios especulan con recuperar un Gran Premio de Motociclismo en la capital de España.

Todos los anuncios deportivos han llegado a Madrid de la misma forma: el Ayuntamiento consigue el evento y luego dispone de los medios necesarios para celebrarlo. Pero no informa de los costes que acarreará cada cita deportiva para la ciudad. El caso más llamativo es el del Gran Premio de Madrid de F1, sobre el que se difundieron cifras astronómicas de inversión y empleo, procedentes de un informe económico que Ifema mantiene oculto. Tampoco se ha hecho público el contrato firmado con la Federación Internacional de Automovilismo ni cuánto le deberá abonar la ciudad por la competición (otros grandes premios pagan entre 20 y 60 millones por año).

Este intento de proyectar la ciudad fuera de nuestras fronteras viene marcado desde el inicio de la legislatura, la segunda de Almeida al frente de Cibeles. El alcalde ha creado un equipo interno para afrontar estos retos, a través de una nueva Dirección General de Relaciones Internacionales. Al frente de ella se encuentra José Francisco Herrera, exdiputado y cargo del PP con amplia experiencia en proyectos de colaboración con otros países. Es uno de los cargos que han hecho aumentar esta partida presupuestaria municipal, pese a que el consistorio aseguró que la reduciría.

Además, la ciudad acaba de aprobar su presencia en la Fundación Consejo de España-Estados Unidos, un organismo que colabora en las relaciones entre ambos países, con importantes empresarios y miembros del Gobierno nacional presentes. El Ayuntamiento lo ha hecho por el “especial interés que promotores norteamericanos están teniendo por nuestra ciudad. Es un espacio en el que hay que estar”, explicaba el pasado jueves la vicealcaldesa, Inmaculada Sanz.

La próxima pelea que librará la capital en el terreno deportivo es la de conseguir la final del Mundial de Fútbol del año 2030, que España organizará junto a Portugal y Marruecos. Una posibilidad a la que también se ha querido sumar Barcelona, con su alcalde Jaume Collboni reclamando el evento. Almeida cree que su ciudad está mejor posicionada: “Cada uno juega sus bazas, nosotros ofrecemos dos estadios espectaculares como el Bernabéu y el Metropolitano, una ciudad volcada con el fútbol y unas infraestructuras y capacidad de organización acreditada en numerosísimos eventos”.

El Ayuntamiento ha facilitado en los últimos años las obras de transformación de ambos estadios. Al Real Madrid le permitió una ambiciosa reforma durante la época de Carmena como alcaldesa y ahora le acaba de conceder la gestión de dos grandes aparcamientos públicos a su alrededor, con los que ingresará cientos de millones de euros. Al Atlético le ha cedido varias parcelas alrededor del Metropolitano, en las que podrá montar lucrativos negocios. También ha favorecido el asentamiento de otros grandes eventos como el Masters de Madrid, uno de los nueve torneos que forman parte del circuito ATP de tenis, solo un escalón por debajo de los cuatro Grand Slams.

Las grandes citas deportivas se suceden en la ciudad, con un objetivo claro en el horizonte: los Juegos Olímpicos. El propio alcalde lo reconoce y llegó a incluirlo en su programa electoral, en el que prometía conseguir muchos eventos de primer nivel para “mantener vivo el sueño olímpico en nuestra ciudad”. Con esta y otras promesas obtuvo la mayoría absoluta el pasado mes de mayo.

El “sueño” de los Juegos Olímpicos, aún sin candidatura formal

Pero Almeida sabe que aunque el Comité Olímpico Internacional (COI) “le deba una sede a la ciudad”, conseguirlo todavía está lejos. “Primero tenemos que tener un consenso en la sociedad madrileña antes de poder lanzarnos a esa candidatura”, explica consciente de que sus ciudadanos tal vez no vean con buenos ojos otro intento olímpico después de los fracasos para las citas de 2012, 2016 y 2020. La última vez que les preguntó el Ayuntamiento, en el año 2022 a través de su web municipal, solo respaldaron la idea el 45% de los encuestados. El resto se oponía (42%) o tenía dudas (11%).

Ante estas reticencias en la población, la estrategia del alcalde pasa por convencer a sus vecinos a base de grandes eventos y fomentando el deporte base. “Es muy importante que grandes eventos deportivos vengan a la ciudad de Madrid, que seamos un icono del deporte pero también que el deporte sea un valor que tengan los chavales desde muy jóvenes”, explicaba este viernes a los medios.

Tenemos que tener un consenso en la sociedad madrileña antes de poder lanzarnos a esa candidatura

En cuanto a una hipotética candidatura para los Juegos Olímpicos, la primera fecha disponible es la del año 2036, ya que los de 2028 están adjudicados a Los Ángeles (EEUU) y los de 2032 irán a Brisbane (Australia). La alternancia de continentes indican que una ciudad europea podría organizar entonces esta cita, que por entonces quedará muy lejos de la de 2024 en París. Almeida todavía tiene tiempo, porque la decisión del COI no se tomará hasta el año 2026 o 2027, según anunciaron sus responsables durante su última reunión.

Para los Juegos Olímpicos de 2036 hay al menos diez países interesados. Habrá que ver si a esta lista se suma España. De momento el alcalde niega contactos con el COI. Tampoco ha tanteado esta posibilidad con los grupos de la oposición en Cibeles. Solo la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, ha adelantado que “están trabajando” en una candidatura. Pero el que tiene la última palabra en este caso es el alcalde de la ciudad. Y él, de momento, está centrado en buscar más eventos deportivos para Madrid.