Luz verde en Cibeles para vender más suelo público para la explotación de promotoras de vivienda privadas. El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, ha dado cuenta este jueves en Junta de Gobierno de la convocatoria y aprobación de los pliegos reguladores de dos concursos de enajenación de suelos municipales para construir residencias en régimen de coliving (viviendas colectivas) durante un plazo mínimo de 15 años.
El resultado de esta operación dará lugar a dos promociones que podrían albergar hasta un centenar de alojamientos colectivos, de entre 25 y 35 m2, que se alquilarían a precios de mercado. Las parcelas están situadas en la calle Pamplona, 31 (Tetuán), y en Carabanchel, en la calle Matilde Hernández, 42 y en un terreno contiguo de Matilde Hernández, 41 a 45 esquina con Linares, 22.
En el caso de la primera, la parcela de Tetuán está calificada de uso residencial libre vivienda colectiva, con una edificabilidad de 1.200 m2 que permitirá el desarrollo de una promoción con una capacidad estimada para 35 alojamientos. El precio de licitación es de 2.456.400 euros.
En Carabanchel, la primera parcela está calificada de uso industrial con uso alternativo residencial y la segunda, de uso residencial libre vivienda colectiva. Ambas suman 1.430 m2 y podrían dar lugar a alrededor de 60 alojamientos. El precio de licitación es de 2.779.524,19 euros. En este útimo caso, el Ayuntamiento persigue, además de facilitar el acceso a la residencia compartida en alquiler, impulsar la convivencia de actividades económicas y culturales, orientando preferentemente la oferta hacia colectivos vinculados con la creciente concentración de actividades creativas en el entorno de la plaza de Almodóvar-Polígono ISO.
El Ayuntamiento permitirá que el alojamiento ocupe un mínimo del 55 % de la edificabilidad en régimen de alquiler libre y, opcionalmente, se podrá desarrollar hasta un 45% de la edificabilidad para diferentes actividades económicas, conforme a los requisitos que se detallan en el pliego de prescripciones técnicas que permite elevados grados de flexibilidad en cuanto a la materialización de distintos programas de usos,apunta el consistorio en nota de prensa.
El coliving o residencia compartida es una forma de alojamiento temporal en la que los residentes comparten espacios y servicios comunes y habitan en habitaciones privadas, más reducidas que una vivienda al uso. Es la primera vez que el Gobierno municipal lanza un concurso público de suelo de su titularidad de estas características, ya que este tipo de viviendas se comenzaron a regular por primera vez con las normas urbanísticas que se aprobaron en noviembre de 2023. Los concursos se publicarán a partir de mañana en el Portal de Contratación.
Suelo público para promotoras privadas
La venta de suelo público es la última de una larga lista de enajenaciones que el Ayuntamiento de Madrid ha ejecutado desde que Almeida es alcalde de la ciudad. En septiembre la EMVS convocó un concurso para ceder varias parcelas destinadas a vivienda protegida para que promotores privados las explotaran durante los próximos 65 años, a cambio de ofrecer “alquileres asequibles”. Antes había intentado algo parecido desde el área de Urbanismo, vendiendo varias parcelas para promover rentas reducidas durante 15 años, pero la mayoría de las promotoras dieron la espalda a esta operación.
Los planes del equipo de Almeida pasan por vender más de medio millón de metros cuadrados de suelo durante la próxima legislatura, valorado en más de 1.000 millones de euros. La mayoría estarán en los nuevos desarrollos por edificar al sureste de la ciudad.