El Real Madrid está obligado a detener la construcción de los dos aparcamientos municipales que ejecuta desde hace meses. Se lo acaba de ordenar el Ayuntamiento de Madrid, después de que este jueves se conociera la sentencia que obligaba a parar los trabajos que actualmente ejecuta el club blanco.
El consistorio comunica al Real Madrid “la necesidad de que ejecute la paralización de obras, adopte las medidas de seguridad con carácter previo y reponga la superficie para no perjudicar la movilidad en el entorno”, explican fuentes del área de Movilidad, responsable de la concesión de ambos aparcamientos. Lo deberá hacer de inmediato, independientemente de que apele o no la sentencia judicial que ordenó este jueves su paralización.
Tanto el Ayuntamiento de Madrid como el club presidido por Florentino Pérez cuentan con diez días para apelar esta decisión judicial, emitida por el Juzgado número 30 de lo Contencioso-Administrativo. El tribunal anunciaba esta medida refrendando el fallo emitido el 23 de mayo de este año, por el que anulaba el concurso municipal que entregó la construcción y explotación de dos aparcamientos municipales al Real Madrid.
Esta concesión prevé la apertura de un parking bajo la Castellana y otro por debajo de Padre Damián para más de 2.000 vehículos. Incluye la construcción de un túnel destinado a absorber la mayor parte del tráfico generado por la infraestructura y en el que también estacionarían autobuses.
Sendos parkings están siendo construidos gracias a un concurso que el Ayuntamiento convocó a instancias del Real Madrid y al que solo se presentó la entidad presidida por Florentino Pérez. La concesión incluye la explotación de las infraestructuras durante los próximos 40 años, así como el disfrute de 20.000 m2 de espacio público anexo para organizar eventos. Dos asociaciones vecinales denunciaron esta concesión en los juzgados, que fue tumbada por la ya citada sentencia de mayo.
La ejecución de los trabajos está siendo polémica, tanto por la sentencia en contra de la adjudicación como por el propio desarrollo de las obras, que hace unos días provocaron la inundación de unos garajes cercanos, según denunciaron los vecinos.
En paralelo, las mismas asociaciones vecinales mantienen una pugna con el Real Madrid debido al ruido que están ocasionando los conciertos programados en el estadio. El director general del club, José Ángel Sánchez, ha sido citado a finales de octubre debido a una querella que incluye un delito medioambiental. La AVPB también ha incluido en el mismo procedimiento al alcalde Almeida y al delegado de Movilidad por autorizar estos eventos.