Es oficial. El pleno de la Junta de Chamberí quiere una Zona de Protección Acústica Especial (ZPAE). La propuesta para solicitarla al área de Movilidad y Medio Ambiente salió adelante en la última sesión de este organismo gracias a una propuesta que impulsó el PSOE y que contó con el apoyo de Más Madrid. Ahora, el concejal de distrito ha de solicitar “la creación inmediata de ZPAE en el área de la calle Ponzano y adyacentes y que afecte, al menos, a las calles incluidas en el perímetro de Martínez Campos, Alonso Cano (pares e impares) Raimundo Fernández Villaverde, Santa Engracia (pares e impares)”, como rezaba el texto aprobado de la iniciativa.
La propuesta salió adelante pese a los votos en contra de los partidos en el equipo de gobierno, PP y Ciudadanos, que se negaron a solicitar la medida de control de ruido en la zona. Pero la abstención de Vox permitió que el texto fuera aprobado. Ninguna de las argumentaciones de los partidos políticos que apoyaron y rechazaron la medida se conoce, debido a que el pleno se celebró a puerta cerrada, la retransmisión en streaming no funcionó y el vídeo colgado en el portal de transparencia carece de audio.
Los vecinos de Ponzano llevan varios años denunciando el deterioro acústico que sufre la zona, que asocian a la apertura de locales de hostelería y de ocio nocturno. Más de un centenar de negocios de este tipo se concentran en un lugar que algunos ya denominan “el Magaluf de Madrid”, sin que ninguna normativa impidiese esta concentración de bares y discotecas. Una ZPAE impediría que los comercios que quedan se transformaran en locales de copas, además de adelantar la hora de cierre.
Además, algunos hosteleros quieren frenar esta imagen de desenfreno con el establecimiento de medidas de autocontrol, aunque eso fue antes de la pandemia: ahora están centrados en superar el bache económico que está suponiendo el coronavirus, sobreviviendo a base de servir a sus clientes en las nuevas terrazas autorizadas sobre sus aparcamientos.
El futuro de la ZPAE es incierto pese a la aprobación en el pleno. Durante la pasada legislatura, tanto PP como Ciudadanos insistieron al Ayuntamiento de Madrid, entonces con Manuela Carmena en la alcaldía, que debía respetar los acuerdos aprobados en los plenos de la Junta de Chamberí. En sus reuniones mensuales salieron adelante algunas iniciativas como reabrir al tráfico la calle Galileo o el cambio de algunos nombres de calles que contaron con el voto en contra de Ahora Madrid pero que se acabaron aplicando. Sin embargo, no parece que la intención del actual equipo de gobierno sea la de limitar la actividad hostelera en una de las zonas de moda para comer y salir de la capital.