La mala conservación de gran parte del arbolado madrileño ha motivado al Ayuntamiento de Madrid para crear el Servicio de Evaluación y Revisión Verde (SERVER), que se encargará de inspeccionar, detectar y resolver los problemas de los árboles cuyo mantenimiento es responsabilidad municipal.
Los expertos de este equipo también se desplazarán a situaciones de emergencia para evaluar la situación y diagnosticar las posibles causas. Un servicio municipal pionero que nace con el objetivo de reducir los riesgos que puede producir el arbolado sobre las personas o bienes, como el piño piñonero que el pasado abril cayó sobre un niño de 4 años.
Con un presupuesto de 30.673.514 euros y un plazo inicial de cuatro años (con una posible prórroga de 2 más), a lo largo del año, las empresas encargadas de la conservación de las zonas verdes de Madrid realizan tareas de mantenimiento y de inspección con la ayuda de 136 personas.
Inspecciones, clave para detectar árboles peligrosos
SERVER se encargará de realizar inspecciones sistemáticas, ordenadas, periódicas en los 21 distritos de la ciudad para detectar los árboles peligrosos, especialmente los ejemplares más antiguos y los que presentan un mayor grado de degradación.
En esta primera fase 21 inspectores analizarán 545.000 árboles, a los que se irán incorporando aquellos árboles que, dado su crecimiento natural, pasen a ser considerados como maduros. Cada uno de ellos será revisado, al menos, una vez, aunque se incrementará la vigilancia de aquellos árboles que se consideren más peligrosos.
Las inspecciones serán exhaustivas (se analizará la dureza de la madera, el estado de las raíces y el interior del tronco) y servirán, además, para recoger y analizar los datos y poder evaluar los problemas, prever futuros daños y planificar actuaciones futuras gracias a una aplicación informática específicamente creada para SERVER.
En su trabajo emplearán tomógrafos para radiografiar el interior del árbol (indican con colores el estado del interior del árbol. Los colores púrpura y morado indican descomposición de la madera y el azul que esa superficie está hueca) y el “Tree Radar”, un instrumento similar a un detector de conductos en el subsuelo que permite saber el estado de las raíces.
Intervendrán ante caídas de ramas o árboles
Pero su papel no se limitará a inspeccionar los árboles sospechosos de poder convertirse en un problema. También acudirán cuando se produzcan incidencias urgentes, como los avisos que recibe Emergencias de Madrid sobre árboles peligrosos bien por caídas de ramas o de los árboles completos.
El servicio de incidencias de SERVER se personará en el lugar y rellenará una ficha con los datos generales del árbol, localización, daños causados, posibles causas, entorno, etc. Además, revisará los árboles colindantes por si presentan características semejantes y, en el caso de que sea necesario actuar con medios técnicos, intervendrán.