La Consejería de Transportes de la Comunidad de Madrid acaba de reabrir una polémica con Rivas que pareció cerrada el pasado mes de febrero. La semana pasada sacó a concurso un nuevo contrato para construir una parada de Metro entre Los Berrocales y Los Ahijones, en los mismos términos que provocaron un conflicto a principios de año.
El problema parte en que el concurso del Gobierno de Ayuso propone que los cambios de trenes en la línea 9 de Metro, que actualmente tienen lugar en Puerta de Arganda, se efectúen en la estación de Los Berrocales a partir de su apertura. Actualmente para llegar hasta Rivas o Arganda desde cualquier estación de la línea 9 en el municipio de Madrid es necesario bajarse de un tren en Puerta de Arganda para montarse allí en otro (línea 9b), debido a que el servicio lo explota otra empresa distinta a Metro, a la que se adjudicó una concesión.
El cambio que propone ahora la Comunidad de Madrid fue denunciado por el Ayuntamiento de Rivas-Vaciamadrid en su momento, ya que consideraba que perjudicaba su conexión con el Cercanías. Hasta 3.000 viajeros se verían afectados diariamente por este cambio a partir del año 2029, fecha estimada de la apertura de la parada de Los Berrocales. Pero el problema quedó en suspenso al resultar el concurso desierto. Incluso el consejero de Transportes, Jorge Rodrigo (PP), aventuró un posible arreglo para que no hubiera que hacer ningún transbordo.
El consistorio de Rivas (IU-MM-Equo) ha vuelto a recurrir este lunes el concurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) en el que pida la paralización de la licitación del proyecto. “Es muy preocupante que después de denunciarlo y de que esta denuncia se admitiera a trámite, la Comunidad de Madrid se reitere en su propuesta, incluyendo de nuevo el cambio de tren y obligando a la población de Rivas a un transbordo más, cuando las deficiencias del servicio ya son absolutas”, asegura la alcaldesa de Rivas, Aída Castillejo, al hacer pública su demanda.
“La Comunidad incumple sistemáticamente su palabra. Tras nuestra primera denuncia, el propio consejero de Transportes declaró que no habría transbordo. Una vez más, la Comunidad de Madrid no atiende a las solicitudes de este Ayuntamiento, que se ve obligado a denunciar de nuevo para evitar el daño sobre el interés general de los vecinos y vecinas de Rivas”, añade.
El consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Jorge Rodrigo, ha confirmado este lunes que “el expediente actual no ha sufrido modificaciones sustanciales respecto al anteriormente licitado ya que, básicamente, se mantienen las mismas condiciones del contrato, y del PPT (pliegos de prescripciones técnicas), sin modificaciones sustanciales”. Sin embargo, ha evitado referirse a la polémica con el ayuntamiento ripense.
El presupuesto base de licitación es de 352.717,37 euros (IVA incluido) y el plazo de ejecución es de 14 meses, con el inicio de las obras previsto para inicios de 2027. El Consejo de Gobierno aprobó el pasado mes de julio el inicio de este trámite. Podrá ser adjudicada por el procedimiento de negociado sin publicidad.
Las razones de la denuncia de Rivas
Actualmente para llegar hasta Rivas o Arganda desde cualquier estación de la línea 9 en el municipio de Madrid es necesario bajarse de un tren en Puerta de Arganda para montarse allí en otro (línea 9b), debido a que el servicio lo explota otra empresa distinta a Metro, a la que se adjudicó una concesión.
En lugar de la solución propuesta, Rivas pidió al Gobierno de Ayuso acabar con los transbordos de la línea 9 de Metro, manteniendo la nueva parada prevista en Los Berrocales pero eliminando los tiempos de espera para los viajeros en Puerta de Arganda. El consistorio ripense recuerda además la demanda de una cuarta estación en el municipio, así como la ampliación de las frecuencias y del tamaño de los trenes o la mejora de la accesibilidad en las estaciones del municipio y la apertura de oficinas de atención a la ciudadanía en las estaciones.
Fuentes del consistorio ripense explicaron a Somos Madrid al plantear la primera denuncia que, como municipio afectado, les hubiera gustado participar en el diseño de los cambios para la línea 9b de Metro, pero no recibieron comunicación ninguna por parte de la Comunidad de Madrid.