Ferrovial, FCC, Dragados y Acciona se llevan los mayores contratos de Almeida y soterrarán el Paseo de Extremadura

Somos Madrid

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Cuatro de las grandes constructoras del país llevarán a cabo los dos mayores contratos de obras licitados por Almeida como alcalde, los que servirán para soterrar el Paseo de Extremadura por 347 millones de euros durante los próximos dos años.

La unión de Ferrovial y FCC Construcción se encargará de enterrar la A-5 desde el cruce de la M-40 hasta Batán por 175.906.354 euros, mientras que la UTE formada por Dragados y Acciona Construcción soterrará el tramo desde Batán hasta su enlace con la avenida de Portugal por 171.477.900 euros.

Las obras empezarán en octubre y tienen un periodo de ejecución de 25 meses, por lo que el Paseo de Extremadura podría quedar soterrado desde la avenida de los Poblados (3,2 kilómetros) a finales del año 2026.

Ocho licitadores habían concurrido a la oferta para llevar a cabo esta obra, dividida en dos lotes, en un proyecto que permitirá cubrir la A-5 y dar continuidad al bulevar peatonalizado de la avenida de Portugal hasta la avenida del Padre Piquer.

El Ayuntamiento de Madrid asegura que los vehículos en superficie se reducirán en un 90 % y también las emisiones contaminantes. Los trabajos adjudicados incluyen también el viario en la nueva superficie soterrada, pero no la urbanización de estos terrenos, que será licitada en un contrato posterior.

Este último, que aún no ha salido a concurso, será el que dé el aspecto definitivo a los nuevos terrenos ganados en superficie, como mostró el consistorio en un vídeo que recreaba el resultado final. Su fecha de finalización estará previsiblemente cercana a las elecciones de primavera del año 2027.

Queda aún por saber cómo se sustanciará el acuerdo entre Ayuntamiento de Madrid y Ministerio de Vivienda para el soterramiento del resto del tramo urbano de la A-5, el que pasa por la futura Operación Campamento. Ambas administraciones acordaron hacerlo de forma completa, pero resta acompasar este contrato al de las obras ahora adjudicadas, para que los vecinos de la zona no tengan que sufrir dos veces los trabajos para enterrar la carretera en varias fases.