Las dudas sobre el acceso en transporte público hasta las nuevas instalaciones de Mad Cool, que este año se desarrollará en Villaverde, se van despejando a medida que se acerca la fecha del festival. La novedad más importante es que habrá servicio de Metro para la vuelta gracias a una apertura extraordinaria del suburbano en un tramo de la línea 3.
El servicio de la línea amarilla alargará su funcionamiento hasta las 4.00. Dos horas más de lo habitual durante cada una de las tres jornadas del festival (del 6 al 8 de julio), avanzan fuentes del festival a este periódico, quienes también indican que asumirán el coste de la apertura especial del servicio. El refuerzo en el suburbano aún no ha sido confirmado por el Consorcio Regional de Transportes de Madrid (CRTM).
Los asistentes al Mad Cool podrán llegar y marcharse en Metro, pero también optar por los autobuses lanzadera especiales contratados por el festival a la Empresa Municipal de Transportes (EMT) que efectuarán el trayecto entre el nuevo recinto de festivales, situado en una antigua zona de trigales, en el extremo sur de Villaverde, y la glorieta de Legazpi. El número de estos buses, que serán articulados y contarán con mayor capacidad de los normales, ha pasado de 3 de la propuesta inicial que hizo el festival al Ayuntamiento a 20, que serán los que operen durante las noches de conciertos. “Habrá siempre dos lanzaderas esperando en la parada”, comentan desde el evento.
La apertura especial de Metro era una de las opciones que había solicitado Mad Cool para la vuelta del festival en su primera propuesta para la movilidad del evento, en la que planteaba que más de la mitad de los asistentes pudieran moverse en coche en lugar de acceder en transporte público. Sin embargo, ahora indican que quieren dar prioridad al transporte público y confían en que con los refuerzos previstos la mayoría de asistentes elija el suburbano o las lanzaderas para llegar a disfrutar de los conciertos.
Un recinto con críticas vecinales pero con el apoyo de Mahou
Desde que se anunció el traslado de Mad Cool de Valdebebas a Villaverde, los vecinos que viven en el entorno (villaverdenses y los que residen en Getafe Norte, a 300 metros del recinto) criticaron su llegada y han creado una plataforma en contra de la celebración del festival. El próximo 27 de junio, por la tarde, han convocado dos marchas de protesta.
Pese a estas críticas, el futuro del recinto de conciertos de Madrid recibió un espaldarazo esta semana, cuando se anunció que la cervecera Mahou había comprado el 51% de Mad Cool Events, la empresa propietaria de los terrenos, montada por las mismas personas que organizan el festival. Su proyecto va para largo y aunque el acelerón está llegando en los meses previos al festival, se va a seguir adecuando una vez que pase el verano. En total tienen previsto invertir hasta 12 millones de euros para convertir el lugar en el espacio de referencia para grandes eventos al aire libre en Madrid durante los próximos años.
La intención de los organizadores del Mad Cool es que el nuevo solar de Villaverde siga acogiendo más música este verano después de que se celebre su festival. De momento tiene programados el concierto de Harry Styles el próximo 14 de julio, el Reggaeton Beach Festival del 22 al 23 del mismo mes y el Coca-Cola Music Experience durante el 1 y 2 de septiembre. Y el recinto ya se ofrece para las giras internacionales del año 2024, para las que contará con un pequeño palmeral y la posibilidad de graderíos adicionales para hasta 14.000 personas.