Almeida enciende las primeras cámaras de vigilancia en el corazón de Malasaña

Las cámaras del Dos de Mayo ya están grabando imágenes las 24 horas del día. El Ayuntamiento de Madrid encendió todos los dispositivos recientemente después de obtener el visto bueno del Gobierno que había reclamado a finales de año.

El encendido fue avanzado hace unos días por ABC y autoriza la grabación revisión de imágenes al Gobierno de Almeida en esta plaza situada en el corazón de Malasaña, donde el alcalde considera que se han registrado “graves problemas de convivencia, que degeneran en la seguridad” durante los últimos años. Son las primeras de este tipo que se colocan en uno de los barrios políticamente más activos de la capital.

Lo que se han encendido son 16 cámaras que apuntan a la plaza pero también a calles como Ruiz, Daoiz, Palma o San Vicente Ferrer. Algunas de ellas están ancladas a fachadas o sobre columnas de unos cinco metros de altura. Cada uno de los dispositivos ha sido recubierto con una carcasa antivandálica.

Este es el mapa de ubicación y vigilancia de las cámaras del Dos de Mayo:

El encendido llega después de que la Delegación del Gobierno autorizada la puesta en marcha del sistema en la última Comisión de Vigilancia, celebrada justo antes de las fechas navideñas. Fue celebrado en redes por el concejal de Centro, Carlos Segura, indicando que con su encendido el alcalde cumplía una de sus promesas electorales para el barrio.

Según el Ayuntamiento de Madrid, este sistema constituye “una herramienta fundamental de ayuda a la seguridad, facilitan las labores policiales de vigilancia y detección de hechos delictivos, así como las de investigación, esclarecimiento y aporte de pruebas ante dichos hechos”, apuntaba en la exposición de motivos para colocar las cámaras. También aseguraba que “contribuye a la disminución de los incidentes en las zonas en las que se implantan” y que hace que el ciudadano “pueda sentirse más seguro, mejorando la convivencia ciudadana”.

Las imágenes de las cámaras llegan al Centro Integrado de Señales de Video, donde la Policía Municipal de Madrid recibe todas las señales de vídeo y los agentes deciden las diferentes operaciones a llevar a cabo en función de la información que reciban.

La videovigilancia en esta plaza de Malasaña fue iniciada por Vox la pasada legislatura, durante un pleno de la Junta de Centro al que el partido de Ortega-Smith llevó una propuesta que parecía destinada al fracaso pero que fue apoyada por PP y Ciudadanos para sacarla adelante. La iniciativa pedía extender estos dispositivos a la plaza de las Comendadoras, Palma o Velarde, “así como en cualquier calle susceptible de ser apta con el fin de garantizar la seguridad del vecindario”, reclamó el partido de ultraderecha. Tanto PSOE como Más Madrid negaron que existieran problemas tan graves que requirieran su colocación.

Dos meses más tarde de esta votación era el propio alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, quien confirmaba la intención del Ayuntamiento de instalar las cámaras de videovigilancia en la plaza del Dos de Mayo, al igual que hará también en Plaza Elíptica, Usera y Villaverde. Después incluyó todas estas promesas en su programa electoral. Las de Malasaña han sido las primeras en encenderse.