El aparcamiento municipal situado bajo la plaza Soledad Torres Acosta seguirá generando importantes beneficios a los intereses privados. El Ayuntamiento de Madrid prepara una nueva concesión que sucederá a la que actualmente gestiona el parking situado junto a la céntrica plaza de Callao, cuya prórroga acaba en noviembre. Con ella el consistorio renunciará durante las próximas décadas a la gestión pública de unas instalaciones que facturaron el año pasado casi 1,5 millones de euros.
El área de Movilidad enajenará la gestión durante los próximos 25 años, según los documentos de la operación a los que ha tenido acceso Somos Malasaña, a cambio del pago de un canon inicial, otro anual y unas obras de adecuación a la actual normativa de accesibilidad, para montar también una pequeña plataforma logística.
El parking de Luna-Tudescos es actualmente uno de los más utilizados en Madrid. Su estratégica ubicación junto a la Gran Vía facilita que se llene durante los fines de semana y que durante el año pasado llegara a facturar hasta 1.472.517 euros, según datos de la empresa que actualmente explota la gestión. Su rentabilidad es muy alta, debido a que los gastos de explotación (personal, suministros o impuestos) rondan los 750.000 euros anuales, según cifras publicadas por el Ayuntamiento de Madrid.
Estos más de 700.000 euros de beneficio anual se suman a los ingresos que la empresa SAMA -la actual concesionaria- consigue por el alquiler de los dos edificios de oficinas y locales comerciales, con unos 10.000 metros cuadrados y por los que solo paga al Ayuntamiento de Madrid un canon de 383 euros mensuales. Su concesión durará 51 años, gracias a que el área de Movilidad decidió prorrogar en 2022 esta gestión durante un año más. La explotación acabará, en principio, el próximo 22 de noviembre. Todavía no se ha comunicado cuál será el destino de estos inmuebles municipales, pero de momento su explotación se ha desligado de la del aparcamiento. Los vecinos reclaman más dotaciones para esta zona del centro de Madrid.
Las obras del nuevo aparcamiento conllevarán dos cambios notables en superficie. Se abrirá una nueva salida para unas nuevas escaleras en la esquina noroeste de la plaza, cerca de su cruce con la calle San Roque, y también desaparecerán previsiblemente los coches de policía mal aparcados en la superficie desde hace años. El proyecto municipal prevé reservar 22 plazas de aparcamiento sin coste para los vehículos de la comisaría de Centro-Norte situada en Luna, de forma que no ocupen el espacio peatonal del entorno de sus instalaciones.
Además de estos 22 estacionamientos, que estarán situados en el primer sótano, habrá otras tantas al carsharing, micrologística o taller de lavado. También se dedicarán 271 para rotación, que generarán la mayor parte de ingresos, mientras que 132 serán de abonados residentes. El estudio económico indica que estas últimas costarán unos 140 euros al mes, aunque su coste final dependerá de las ofertas que hagan las empresas que opten al concurso. En el cercano parking de Plaza del Carmen, por ejemplo, su precio se ha elevado hasta los 179,10 euros al mes.
Canon inicial de 4,6 millones
A diferencia de las privatizaciones de aparcamientos que ejecutó el equipo de Almeida durante su primera legislatura, el área de Movilidad pide ahora adelantar parte del canon que cobrará a la concesionaria, lo que le permite al Ayuntamiento contar con capital para inversiones inmediatas, en lugar de distribuir la mayor parte de este beneficio durante el próximo cuarto de siglo.
Es un modelo que estrenó para los tres aparcamientos de Velázquez y, en el caso de Luna-Tudescos, servirá para exigir a la empresa concesionaria al menos 4.663.200 euros de pago inmediato, además de otro canon anual de 194.300 euros durante los 25 años de concesión. Según las cuentas municipales con estos pagos, el gasto en obras previsto (casi seis millones de euros) y los ingresos planeados permitirán obtener una rentabilidad de la inversión del 8% antes de impuestos.
Los plazos para esta operación son todavía una incógnita. Una vez que ya ha pasado el periodo de información pública de los planes municipales, el área de Movilidad tiene pendiente sacar el concurso para la explotación de estas instalaciones, con un valor estimado de 52.226.364 euros y que deberá pasar antes por Junta de Gobierno. Las obras del aparcamiento durarán doce meses a partir de la fecha de firma del nuevo contrato.
Solo sobrevivirá uno de los árboles de la plaza
La reforma del parking de Luna se llevará por delante la mayoría del arbolado de la plaza. Solo uno de los 17 ejemplares existentes -la mayoría castaños de Indias y aligustres- se salvará de las talas o de los trasplantes previos a las obras, en una actuación que recuerda al criticado “arboricidio” de la plaza del Carmen, que tuvo lugar hace menos de un año.
Los documentos consultados por este periódico indican que el Ayuntamiento tiene previsto talar diez árboles y trasplantar otros cinco, aunque el propio estudio municipal del arbolado da por hecho “que un 30% de los árboles trasplantados no sobreviven”.
Como compensación por la tala de todos estos ejemplares, de entre cuatro y siete metros de altura, la concesionaria estará obligada a aportar 441 árboles a los viveros municipales.
La privatización del aparcamiento de Luna sigue con las políticas del equipo de Almeida de sacar a concurso para gestión privada de todos los parkings del centro de Madrid, al contrario de lo que hizo su predecesora, Manuela Carmena. La exalcaldesa consiguió ingresos anuales cercanos al millón de euros con la gestión pública del estacionamiento subterráneo en Plaza de España, pero el área de Movilidad actual apuesta por que sean las empresas las que facturen los tickets durante décadas a cambio de obras de mejora en las instalaciones.
La mano derecha de Almeida, Borja Carabante, ha privatizado durante su mandato la gestión de los aparcamientos de plaza del Carmen, Santo Domingo o plaza de las Cortes. Está pendiente de adjudicar los polémicos parkings del Bernabéu y los tres de Velázquez, además del concurso que falta por salir del citado aparcamiento de Luna y de Santa Ana.