Las obras de construcción del mercado provisional que albergará a los comerciantes de Barceló durante el derribo y posterior reconstrucción del centro comercial han acabado con los árboles de los Jardines del Arquitecto Ribera.
Ayer por la mañana, muchos de estos enormes ejemplares quedaron reducidos a simples trozos de madera. No se les trasplantó a parte alguna, si no que, como puede verse en las imágenes, fueron talados y cargados en un vehículo para su transporte.
Desde la Asociación de Vecinos del Barrio de Universidad, Isabel Rodríguez denuncia estos hechos y cree que este cortar por lo sano no significa otra cosa que “se está preparando otra plaza 'dura' en la ciudad”.
“Cuando estos jardines vuelvan a ser utilizados como espacio público de recreo lo llenarán de cemento, a no ser que los vecinos nos movilicemos para evitarlo”.
De todos los árboles que había en la plaza sólo han quedado en su sitio los de la fila que corría paralela al colegio Isabel la Católica, en cumplimiento del compromiso adquirido en su día por los responsables municipales con los padres del citado centro de educación.