Hay imágenes que necesitan pocas palabras que las expliquen. En la calle Madera, casi en la confluencia con Escorial, nos encontramos con esta curiosa estampa: un carrito de la compra atado a un árbol con una señora cadena, para que nadie se lo lleve. Aparcado como si de una bici o de una moto se tratara. La imagen no es casual, cualquiera que deambule por esta calle podrá verlo día sí y día también. Estas son las cosas que tiene Malasaña...