La resaca del controvertido nombramiento de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, como alumna ilustre de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) continúa después de la tensa jornada vivida este martes en la Facultad de Ciencias de la Información de Ciudad Universitaria. A las protestas tanto dentro como fuera del campus, que no se apaciguaron pese al dispositivo policial y los controles en los accesos (solo se permitió la entrada a estudiantes con carné de la Facultad e invitados), y el discurso viral de la mejor alumna de la promoción, se une ahora un nuevo comunicado que parte del profesorado y al que ha tenido acceso Somos Madrid.
“Aunque lo advertimos reiteradas veces previamente, la Universidad Complutense fue utilizada en una serie de sucesos en los que la manipulación y la instrumentalización del escándalo eran el fin último”, afirman en este escrito elaborado y respaldado por docentes de la Facultad de Ciencias de la Información. Aseguran que los hechos ocurridos han “dañado profundamente la credibilidad como institución” de la UCM, así como la “independencia y autonomía universitarias”. Unas palabras que llegan después de que Ayuso haya acusado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de enviar “agentes” para asustarla y crear “un clima que no se ha dado en toda la legislatura”.
Las críticas por parte de un amplio sector de la Complutense cobran ahora un nuevo cariz, pero como recogen en el escrito aparecieron desde el momento en el que la concesión del título se hizo pública. Antes del acto se habían recopilado ya más de 1.200 firmas de personal docente e investigador dirigidas al rector, Joaquín Goyache.
Un dirigente universitario que ha convocado elecciones a su cargo en mitad de la polémica (próximo 21 de marzo) y poco antes del cambio en las reglas para aspirar a esta designación recogidos en la futura Ley de Universidades, según la cual ya no hará falta ser catedrático para aspirar al puesto. Goyache es el gran valedor de convertir a Ayuso en alumna ilustre: lo hizo por designación propia, mientras que el resto de nombres se votaron en la Junta de Facultad. Es además la primera vez que una distinción así va a parar a un político en activo, para más inri en pleno año electoral.
La sección sindical de la UCM también comunicó su rechazo a un nombramiento que “está causando sorpresa, estupor y finalmente indignación a la comunidad universitaria”. Numerosos profesores han expresado asimismo su disconformidad en comunicados o publicaciones personales. La catedrática de Física de la Tierra y coordinadora del Máster de Meteorología y Geofísica de la UCM, Belén Rodríguez de Fonseca, llegó a dirigir una carta al vicerrectorado de investigación criticando la distinción a “una persona que hace declaraciones en contra de la lucha contra el cambio climático tildando de comunistas a los que trabajamos sobre este tema”.
El exrector de la Complutense, José Carrillo, calificaba el nombramiento de “inapropiado” en una columna publicada en elDiario.es, ya que “la Comunidad de Madrid está a punto de estrenar la decimotercera universidad privada, siguiendo con su política de descapitalización de la Universidad, convirtiéndola en un negocio”. Dos vicerrectores ligados al PP y al reconocimiento a la dirigente autonómica han presentado su dimisión desde que se hizo público.
Un acto con “arbitrariedades e intereses ajenos”
“No es compatible un acto de entrega de premios con que la universidad se convierta en un recinto con alta presencia policial, restricción de acceso a los estudiantes y universitarios, y en el que las acusaciones, insultos y agresiones verbales fueron protagonistas. La organización del evento y su control sufrió arbitrariedades y se sujetó a intereses ajenos al valor académico”, denuncia el profesorado en este comunicado.
Este último punto hace referencia a la entrada de un grupo de jóvenes escoltado por la Policía minutos antes de la llegada de Ayuso, que procedió luego a vitorear y aplaudir al grito de “libertad”, “mayoría absoluta” o “fuera comunistas de la Universidad”. Entre ellos, liderando las proclamas y las provocaciones a los estudiantes que se manifestaban contra los honores a la líder del Gobierno de Sol, se encontraba el presidente de Nuevas Generaciones del Partido Popular, Ignacio Dancausa.
Dancausa es estudiante en la UCM, pero no de la Facultad de Ciencias de la Información, así que en igualdad de condiciones con el resto de sus compañeros no debería haber tenido el acceso permitido. Sin embargo, fuentes del equipo de prensa del acto reconocieron a este medio que estos jóvenes vinieron invitados por la propia Comunidad de Madrid.
La Complutense, ante una “crisis de credibilidad”
Unas maniobras que, según el escrito, acarrean “una crisis de credibilidad que en unas horas se lleva por delante no solo la imagen de la Facultad, sino de nuestros estudiantes, cuyo esfuerzo se premiaba ayer y que por las circunstancias generadas se vio desplazado”. Lamentan que todo ello “produce una imagen en los medios de comunicación y redes sociales alejada de la vida diaria de nuestra Facultad y de nuestros estudiantes, donde el espíritu de convivencia, tolerancia, y respeto son esenciales”.
Además de manifestar su rechazo, el equipo docente finaliza el documento con la petición de que se actúe con contundencia ante lo ocurrido: “La Universidad Complutense y la Facultad de Ciencias de la Información, como entidades públicas, deben servir únicamente al interés general y no al beneficio particular de cualquier persona o grupo de poder. Pedimos responsabilidades tanto en la dimensión de la gestión y gobierno de la universidad como a todas las instituciones implicadas en este conflicto”. Está en juego la credibilidad de “la institución más antigua y con mayor tradición de investigación y docencia en estudios de Periodismo, Comunicación Audiovisual y Publicidad de España”.