Los coches híbridos gozan de una creciente aceptación en numerosos mercados, sobre todo europeos, motivo por el que cada vez más marcas se deciden a comercializar vehículos de estas características. La japonesa Subaru acaba de sumarse a la tendencia y ha escogido la quinta generación de su crossover Forester, el modelo más vendido de su historia a nivel mundial, para una primera incursión en la tecnología, que en su caso denomina e-Boxer.
El Forester Eco Hybrid incorpora un tren de propulsión compuesto por un motor bóxer de gasolina 2.0 que rinde 150 CV, un pequeño propulsor eléctrico de 17 CV -integrado en la caja de cambios automática Lineartronic- y una batería de iones de litio de 0,6 kWh de capacidad.
Tanto este modelo como el XV Eco Hybrid están construidos sobre la Plataforma Global de Subaru, estrenada por el Impreza y el XV, que permite este tipo de soluciones mecánicas más respetuosas con el medio ambiente al tiempo que proporciona mejoras significativas en dinamismo y estabilidad del vehículo, precisión de guiado y reducción de vibraciones.
El primer Subaru híbrido ve mejorada su versatilidad gracias a los modos de conducción que pueden seleccionarse por medio del botón Si-Drive: en el llamado Intelligent se prima la eficiencia, mientras que en Sport se pone a disposición del usuario la mayor aceleración y deportividad al volante.
El sistema e-Boxer favorece además las prestaciones off road del modelo porque permite añadir dos programas adicionales a los habituales del dispositivo X-Mode: Snow Dirt, para cuando se circula por nieve o grava, y Deep Snow Mud, con el que afrontar con garantías los tramos más complicados de nieve y barro profundos.
El nuevo Forester crece en todas sus cotas respecto a su antecesor y presenta una estampa aún más robusta, en buena parte debido a unas líneas de cintura que rodean el vehículo para enfatizar su altura y fortaleza y a unos prominentes pasos de rueda que resaltan la funcionalidad de su sistema de tracción integral permanente, una de las señas de identidad de la marca de las seis estrellas.
El incremento de tamaño tiene una correspondencia directa en las dimensiones del habitáculo, más generosas también en todas las mediciones. Por su parte, la presencia de la batería del sistema híbrido no afecta ni a la amplitud interior ni a la capacidad del maletero, que de hecho aumenta ligeramente hasta alcanzar los 509 litros, cuatro más que los del modelo a la venta hasta el momento.
El sistema de seguridad preventiva Subaru EyeSight, de serie en los Impreza, XV, Levorg, Outback y Forester de la anterior generación, se complementa ahora con el DMS (Driver Monitoring System), que utiliza el reconocimiento facial para monitorizar al conductor y detectar si se halla distraído o fatigado, en cuyo caso emite un aviso sonoro. El Forester Eco Hybrid introduce también un dispositivo de alerta de tráfico cruzado posterior (RAB por sus siglas en inglés) que ayuda a evitar colisiones al circular marcha atrás.
El coche se presenta en España en tres niveles de acabado: Sport Plus, Executive y Executive Plus. El primero parte de 32.3450 euros (249 euros al mes si se elige la financiación que ofrece la marca) e incluye faros direccionales led, detector de vehículos en el ángulo muerto, sistema X-Mode con asistente de ascenso y descenso de pendientes, salidas de climatización traseras y conectividad Apple CarPlay y Android Auto, entre otros elementos.
Las terminaciones Executive, desde 35.150 euros, añaden los sistemas DMS y RAB, además del ajuste eléctrico del asiento del conductor, y las Executive Plus, disponibles a partir de 36.650 euros, agrega techo solar doble y asientos de cuero.
Hasta la llegada de este modelo híbrido, la estrategia de Subaru España para ofrecer vehículos más respetuosos con el medio ambiente ha consistido en una gama de versiones bi-fuel, capaces de funcionar tanto con gasolina como con GLP (gas licuado del petróleo), de sus modelos Impreza, XV, Forester, Outback y, próximamente, Levorg. En 2019, uno de cada cinco Subaru vendidos en nuestro país ha embarcado esta tecnología, que da derecho a la etiqueta Eco de la DGT, al igual que la híbrida recién incorporada en el Forester.
Con vistas al futuro, Subaru ha firmado un acuerdo con Toyota, uno de sus aliados tradicionales -que posee además el 20% de su capital-, para desarrollar conjuntamente una plataforma destinada a fabricar vehículos eléctricos de tamaño mediano y grande, así como un nuevo SUV eléctrico del segmento C que pondrán a la venta ambas compañías.