Kia Ceed Tourer PHEV: todo en uno
Por razones que nadie sabe determinar con certeza, los coches familiares no gozan en España del predicamento de que gozan en otros países europeos como Francia, Alemania o Italia. Conocidos históricamente como rancheras, break o combi, lucen ahora denominaciones más sofisticadas y escoradas al inglés que surgen de combinar conceptos como touring, wagon, estate y otros. Sea como fuere, no son los vehículos favoritos del conductor de nuestro país.
Ello no impide que, por fortuna, todavía haya marcas que comercializan aquí este tipo de carrocerías, en las que algunos ven todavía una alternativa a los omnipresentes SUV. La coreana Kia mantiene en su catálogo uno de estos modelos irredentos, el Ceed Tourer, que a nuestro juicio presenta el atractivo adicional de estar basado en un vehículo compacto y no de una berlina.
En este último caso, los familiares resultantes tienen en ocasiones una longitud excesiva que no se traduce en una mejora sustancial ni de la capacidad de carga ni del espacio interior en las plazas traseras. Al contrario, los derivados de compactos suelen disfrutar de las dimensiones justas sin cargar con las esclavitudes de los coches muy grandes.
En el caso del Ceed Tourer, hablamos de 4,60 metros de largo que dan lugar a una amplia habitabilidad trasera y un compartimento de carga que llega a los 625 litros en las versiones térmicas convencionales. Esa cifra merma de forma apreciable, hasta 437 litros, en la variante híbrida enchufable (PHEV) que acabamos de probar, en la que se aprecian en contrapartida varias ventajas de enjundia.
La primera es que el coche puede realizar la mayoría de los desplazamientos cotidianos en modo eléctrico, es decir, sin consumo ni emisiones locales, y que los viajes más largos cabe hacerlos sin necesidad de parar a recargar la batería, de 8,9 kWh. Dicho esto, los 47 kilómetros -menos en el uso real- de alcance eléctrico que ofrece Kia en este modelo se van quedando rezagados con respecto a las autonomías de otros enchufables de la competencia.
Nos ha sorprendido gratamente la capacidad que tiene el Tourer PHEV de recuperar carga para la batería haciendo uso del modo Sport. Ya sabemos que no es la forma más eficiente de conseguirlo, al tratarse de cambiar consumo de gasolina por electricidad que se almacena para más adelante, pero la particularidad del caso es que aquí es fácil de lograr sin que el consumo de carburante apenas se resienta.
En una conducción que combine ciudad y alrededores con carretera, y a un ritmo que puede considerarse normal -sin obsesionarse con la eficiencia-, el consumo ronda los 4,2 litros/100 km siempre que dispongamos de algo de energía en la batería. De lo contrario, el motor de gasolina, un 1.6 de 105 caballos, cargará con todo el peso de desplazar el vehículo y no recibirá el apoyo de los 45 kW del motor eléctrico. Resultado: fácilmente veremos en el ordenador de viaje registros por encima de los 7 litros/100 km, si bien hay que señalar que solo una conducción muy exigente llevará a vaciar por completo la batería.
Equilibrado y económico
Con 141 CV de potencia combinada, es bastante obvio que el Ceed Tourer PHEV no es un vehículo de orientación deportiva ni lo pretende. Al contrario, se ha concebido para emular los consumos de un motor diésel y proporcionar un comportamiento equilibrado y eficaz, sin muchas alharacas. De todas maneras, no resulta torpe en ningún caso, y en modo Sport se desenvuelve casi con agilidad.
La unidad que ha pasado por nuestras manos, correspondiente al acabado más completo de la gama -eMotion, desde 37.744 euros-, incorporaba prácticamente todo lo que cabe pedir a un coche actual, y añadía además un Pack Premium que cuesta 2.100 euros adicionales y comprende todos estos elementos: asientos delanteros eléctricos, con calefacción, ventilación y ajuste lumbar, volante y asientos traseros calefactados, portón trasero manos libres, tapicería específica y equipo de sonido JBL.
Sin necesidad de llegar a tales desembolsos, el Ceed Tourer PHEV está a la venta en el algo más modesto acabado eDrive, que sale por 34.444 euros. No diremos que se trata de un precio bajo, dado el nivel que han alcanzado los coches en los últimos años, pero desde luego permite afirmar que estamos ante uno de los híbridos enchufables más asequibles del mercado. Para quien no quiera a toda costa un SUV, el familiar de Kia es, además, uno de los más equilibrados y versátiles.