Italia prueba el primer tramo de carretera en el que los vehículos eléctricos pueden recargarse mientras circulan
Al modo como un tranvía se surte de electricidad por medio de la catenaria bajo la que circula, la carga por inducción de coches eléctricos propone básicamente el mismo principio, solo que en su caso la fuente de energía se sitúa por debajo, y no por encima, del vehículo. Desde que se tuvo noticia de este ingenio, muchos han soñado con él como posible panacea para olvidarse de los postes de carga en ruta y los problemas que pueden acompañarlos, ya sea el tiempo de espera, una avería o simplemente el hecho de encontrarlos ocupados cuando más se necesitan.
Por supuesto, una cosa es recargar nuestro vehículo eléctrico mientras está aparcado, en cuyo caso la situación no difiere mucho de conectarlo a un enchufe cualquiera, y otra mucho mejor, ir rellenando las baterías -sin enterarnos- mientras conducimos. Esto es justamente lo que está probando el proyecto Arena del futuro, respaldado por Stellantis y otros socios internacionales, instituciones públicas y universidades con el fin de constatar en condiciones reales el revolucionario sistema de recarga eléctrica por inducción dinámica (DWPT por las siglas de Dynamic Wireless Power Transfer).
La firma A35 Brebemi ha sido la encargada de construir la pista de pruebas donde testar este sistema. Se trata de un circuito de 1.050 metros de longitud situado en una zona privada de la autopista italiana A35, cerca de la salida Chiari Oeste, y alimentado por una potencia eléctrica de 1 MW. Un Fiat 500e y un autobús Iveco E-Way han rodado desde el pasado día 2 de diciembre “con resultados más que esperanzadores”, según informa la compañía Stellantis.
Por medio del DWPT, los modelos eléctricos pueden recargarse sin cables circulando por carriles electrificados gracias a un innovador sistema de bucles instalados bajo el asfalto. Esta tecnología es adaptable a todos los vehículos equipados con un receptor especial que transfiere la energía procedente de la infraestructura de la calzada a la batería con el fin de generar un sistema de movilidad de cero emisiones.
La conectividad avanzada garantizará, al mismo tiempo, y gracias a las tecnologías del internet de las cosas, una seguridad vial máxima al objeto de permitir un diálogo constante entre las autopistas y los vehículos que circulan por ellas. El asfaltado de las calzadas se optimizará, asimismo, para convertirlo en más duradero sin afectar a la eficacia y la eficiencia de la carga inductiva.
La participación de Stellantis en este proyecto se inscribe en el marco de la estrategia de electrificación que el consorcio hizo pública con motivo del EV Day, celebrado el 8 de julio, y que consiste en ofrecer no solo vehículos punteros capaces de alcanzar una gran autonomía y velocidades de recarga ultrarrápidas, sino también un ecosistema de servicios para responder a las necesidades, cada más exigentes, de los usuarios.
Menor tamaño de las baterías
Según Anne-Lise Richard, jefa de la Unidad de Negocio Global e-Mobility de Stellantis, la tecnología DWPT representa “una solución vanguardista que aporta una respuesta concreta a los problemas de autonomía y recarga que preocupan al cliente. La recarga de coches en movimiento presenta ventajas evidentes en términos de tiempo de recarga y tamaño de las baterías”, pues, de generalizarse dispositivos como este, ya no tendría sentido instalar sistemas de almacenamiento de gran tamaño a bordo de los vehículos eléctricos.
La oferta potencial de servicios innovadores como el sistema DWPT ayuda a Stellantis a alcanzar sus ambiciosos objetivos en materia de electrificación anunciados en el EV Day: más del 70% de sus vehículos vendidos en Europa y más del 40% de los que se entregarán en Estados Unidos serán vehículos de bajas emisiones en 2030.
La recarga por inducción dinámica es el primer ejemplo de innovación colaborativa para la movilidad cero emisiones de personas y mercancías que impulsa A35 Brebemi, la concesionaria de la autopista que une las ciudades de Brescia y Milán al sur de la autopista A4. En la iniciativa participan Aleatica con Stellantis y ABB, Electreon, Fiamm Energy Technology, Iveco, Iveco Bus, Mapei, Pizzarotti, la Escuela Politécnica de Milán, Prysmian, Stellantis, TIM, la Universidad de Roma III, la Universidad de Parma, Vigili del Fuoco y Polizia Stradale.
El proyecto, junto con la reciente inauguración del circuito Arena del futuro, ha sido designado recientemente como una de las 100 invenciones más importantes de 2021 por la prestigiosa revista Time.