Después de estrenar el sistema en la ciudad donde tiene su sede, Ingolstadt, Audi acaba de introducir en Düsseldorf su servicio de información de semáforos, que aspira como ideal a que todos los conductores puedan circular por una gran ciudad como la situada a orillas del Rin sin detenerse en ningún momento. Quién no ha soñado con un invento semejante cuando se halla preso en un atasco, y también cuando, no habiendo tráfico en las cercanías, tiene la sensación de pillar todos los discos en rojo a su paso.
Pues bien, el servicio Audi Traffic Light permite a sus clientes conocer de antemano el momento en que van a ponerse en verde los semáforos preparados para el experimento, además de informarles de la velocidad exacta a la que tienen que desplazarse para encontrarlos abiertos. Con ambos datos ellos se suman a lo que se conoce como ola verde.
Desde finales de enero, los conductores de modelos de Audi pueden ver en la instrumentación de a bordo la información de 150 semáforos de Düsseldorf, gracias a la cual aumentan sus posibilidades de aprovechar las secuencias con los semáforos en verde. A principios de verano serán 450, de un total de 600, los semáforos de la ciudad conectados a esta red de servicios V2l (Vehicle-to-Infrastructure).
El sistema de información de semáforos de Audi consta de dos funciones diferenciadas: la indicación de velocidad óptima para llegar al disco en verde (GLOSA: Green Light Optimized Speed Advisory) y el tiempo restante para que el semáforo esté abierto (Time-to-Green). La primera de ellas puede sugerir también reducir gradualmente la velocidad unos 250 metros antes del semáforo, de manera que tanto este conductor como los que le siguen lleguen al cruce cuando el semáforo se ponga verde.
Se evitan paradas y arranques innecesarios
Así se evitan paradas y arranques innecesarios, como es evidente, y aumenta no solo la eficiencia, sino también la comodidad y la seguridad. Además, se fomenta un estilo de conducción relajado, opuesto al comportamiento agresivo que muestran demasiados conductores acostumbrados a la práctica del acelerón brusco seguido del frenazo repentino e in extremis cuando no hay otro remedio que detenerse.
En el caso de que sea inevitable detenerse ante la luz roja, el sistema activa una cuenta atrás (Time-to-Green) que muestra los segundos que faltan para reiniciar la marcha y los conductores pueden relajarse, levantar el pie del acelerador y ahorrar combustible, merced a los cada vez más extendidos sistemas stop & start. En un proyecto piloto realizado por Audi, el consumo de carburante se redujo un 15%.
Para que el servicio funcione se precisa un complejo algoritmo analítico que realiza predicciones a partir de tres fuentes: el programa de control de las señales de tráfico; los datos en tiempo real del ordenador de tráfico, de una combinación de cámaras que vigilan la circulación y de las líneas separadoras de la carretera, así como sobre autobuses o tranvías que se aproximan y sobre botones que pulsan los peatones; y, por último, un registro histórico de datos. El algoritmo utiliza toda esta información para mejorar continuamente y aprender, por ejemplo, cómo cambia la intensidad del tráfico en la ciudad por las mañanas o cuando los niños salen de guarderías y colegios.
La flota de vehículos implicados en el proyecto es vital para su buen funcionamiento, pues los datos (anónimos en principio) que envían al servidor son cotejados por Audi con los cruces reales donde se encuentran los semáforos. Solo después de verificarse la correspondencia se muestra la información en el tablero del coche, según explica Andre Hainzlmaier, responsable de Desarrollo de Apps, Servicios Conectados y Smart City de la marca.
En el futuro también las propias ciudades recibirán información útil sobre su infraestructura de semáforos. Conocerán, por ejemplo, si los vehículos se detienen con una frecuencia inusual en una intersección determinada o si el tiempo de espera en ella es más largo de lo normal. De esta manera las autoridades municipales podrán regular los semáforos de forma más precisa y el tráfico fluirá mejor.
El servicio de Audi se estrenó en 2016 en Las Vegas y hoy está disponible en más de 10.000 intersecciones en Norteamérica; unas 2.000 de ellas se encuentran en Manhattan y más de 1.600, alrededor de Washington. El sistema está activo en todas las versiones de los modelos e-tron, A4, A6, A7, A8, Q3, Q7 y Q8 fabricados a partir de julio de 2019 (año modelo 2020), y requiere contar con el paquete Audi connect Navigation & Infotainment y con el dispositivo (opcional) de reconocimiento de señales de tráfico basado en cámaras.