Las reacciones a las cifras de déficit público no se han hecho esperar, y la situación de la Región de Murcia como una de las tres comunidades más incumplidoras, junto con Cataluña y la Comunidad Valenciana, ha reforzado las tesis de Podemos. En opinión de Óscar Urralburu, “una vez más el Gobierno regional del PP vendió humo cuando se vanagloriaba de que la economía de la región había crecido un 3%”.
Las cuentas son “fáciles” a juicio del portavoz de Podemos: “Si de ese 3% de crecimiento del conjunto de la economía del que hablaba el Ejecutivo, un 2,52% se debe al engrosamiento del déficit público autonómico, obtenemos un crecimiento neto que no genera empleo y si lo hace, es de baja calidad”. Óscar Urralburu ha señalado también que se trata de cifras “no cuestionables que miden décima a décima la insuficiencia de un modelo económico y la incapacidad de un Gobierno para hacerlo rentable para sus ciudadanos”.
Urralburu ha defendido que el déficit no es causa de “la inversión pública o de políticas distributivas de renta, sino del pago de la deuda y de las infraestructuras ruinosas en las que el Partido Popular ha enterrado a la Región de Murcia”. “Y de esta forma, nunca vamos a salir de esta calamitosa situación”, ha añadido.
El dirigente de Podemos ha reiterado que “el PP ni siquiera es virtuoso con sus recetas”, es decir, con el modelo de las políticas de austeridad: “Vemos cómo continúa el déficit público, no se genera empleo en términos de horas trabajadas anuales, el endeudamiento continúa creciendo y la recuperación económica no se sustenta en sectores económicos capaces de distribuir la riqueza y disminuir las desigualdades, sino que las aumenta”, señala Urralburu.
Por último, el secretario general y portavoz parlamentario regional de Podemos ha insistido en que “todos estos desequilibrios” son particularmente “feroces” en el caso de la economía murciana, puesto que “en buena medida se ceban con la Región por la pésima gestión del gobierno de Pedro Antonio Sánchez, que es incapaz de levantar las alforjas y cuestionar la lamentable, oscurantista y corrupta herencia recibida de Valcárcel”.