Denuncian la destrucción del yacimiento arqueológico Las Balsetas

La Asociación Ecologistas en Acción denuncia la destrucción del yacimiento arqueológico ‘Las Balsetas’, con restos “romanos del siglo I y II antes de nuestra era”, debido a la extracción de tierra y el uso de maquinaria pesada para el enterramiento de residuos tóxicos en sus inmediaciones.

El yacimiento, que desde 2011 es un Bien Catalogado por su relevancia cultural por la Dirección de Bellas Artes y Bienes Culturales. dependiente de la Consejería de Cultura y Turismo, ha sido usado como suministrador de tierra –existen lugares o canteras habilitados para extraer tierra-, estando en estos momentos “destruido”, según reza la denuncia.

Sesgún esta organización, la tierra extraída del yacimiento, que tiene una estructura hidráulica con un embalse y diferentes balsas, ha sido usada por Befesa –empresa concesionaria de la gestión de residuos tóxicos en la zona desde hace 15 años- para sepultar material contaminante en el Valle de Escombreras, lugar donde está localizado el yacimiento, en el Paraje del Cementerio. Con esta acción la empresa de gestión de residuos habría incumplido cuatro leyes autonómicas relativas al patrimonio cultural, la protección ambiental integrada, la ley de montes y la ley del suelo.

La denuncia de un extrabajador

Los hechos se conocieron a raíz de la denuncia ante la Guardia Civil de un extrabajador de la empresa Befesa, que grabó un vídeo de los enterramientos de residuos tóxicos para los que la empresa concesionaria no está capacitada. La denuncia de este empleado habla de la sepultura de un residuo líquido, más concretamente del o-diclorobenceno, usado en la fabricación de plásticos de la empresa Sabid.

Tras la denuncia, la Guardia Civil junto a la Dirección de Medio Ambiente de la Comunidad Autónoma, comenzaron las investigaciones. Las primeras pesquisas revelan el uso de tierra de una zona cercana para sepultar los bidones con residuos legales, y también lo que podrían ser residuos ilegales. Es en ese momento, cuando Ecologistas en Acción se percata de que esos terrenos usados como suministradores de tierra son los pertenecientes al yacimiento de ‘Las Balsetas’.

Durante las acciones llevadas a cabo por la asociación de ecologistas, éstas demuestran que “nadie advirtió de la existencia de un vertedero” en una zona de riesgo, o “mejor, nadie advirtió de que ahí había un yacimiento protegido”, concluyen los responsables de la asociación, hecho que incumple las directrices que la Consejería de Cultura y Turismo remarcaba en el BORM del 29 de junio de 2011, donde señalaba que toda actividad que implicase remover el terreno debía contar con la autorización expresa de la Dirección de Bellas Artes y Bienes Culturales. Desde Ecologistas en Acción explican que dicha autorización no existe, y por tanto, que Befesa no dispone de ningún permiso para extraer tierra del yacimiento, algo que puede costar a la empresa de gestión de residuos hasta 200.000 euros, más una responsabilidad penal.

El currículum del vertedero

La denuncia de Ecologistas en Acción contra la empresa gestora del vertedero se une al listado en el que se incluyen las de ANSE, al respecto del enterramiento irregular de residuos altamente contaminantes fuera del recinto. A principios del mes de junio, la Guardia Civil detuvo a cinco personas por el enterramiento irregular de mil toneladas de residuos tóxicos, entre los que se encuentra el amianto.

Tras los hechos, Izquierda Unida-Verdes exigió la dimisión “inmediata” de la directora general de Calidad Ambiental, María Encarnación Molina, por “poner en juego” la salud y la seguridad de los habitantes del entorno, mientras que la Asociación de Naturalistas del Sureste pidió la clausura del vertedero de la empresa Befesa, y recordó que ya denunciaron ante el SEPRONA, a mediador de mayo, la realización de movimientos de tierras y vertidos en dicho vertedero.

Por su parte, el responsable de Medio Ambiente del PSRM-PSOE, Enrique Ayuso, calificó de “desprecio a la protección del medio ambiente” la situación generada en el vertedero del Valle de Escombreras, y lo atribuyó a la “dejadez de sus funciones” y al “abandono del actual Gobierno regional y de la todavía consejera de Medio Ambiente”, Adela Martínez-Cachá, “en su obligación de control de los residuos tóxicos enterrados ilegalmente en Escombreras”.