La llegada masiva de casi 400 tractores al centro de Murcia, procedentes de diferentes puntos de la Región, han marcado el comienzo de una multitudinaria manifestación que ha reclamado mejoras en el sector agrario. Casi siete mil agricultores, jornaleros y empresarios, se han aglutinado a golpe de bocinazos, pitos, humo y gritos, en la capital murciana, bajo el lema Agricultores al Límite. Junto con Murcia, el campo ha salido a la calle en Tarragona, Guadalajara y Mérida.
La manifestación ha estado coordinada por los principales sindicatos agrarios, Coag, Asaja Región de Murcia y la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos, que han encabezado la marcha con una pancarta con la consigna 'Agricultores y ganaderos, ¿qué comeremos mañana?'. Los organizadores, que se han mostrado optimistas por el nivel de convocatoria, han hecho hincapié en la implementación de unos precios de origen más justos, la disminución de los precios del agua de regadío y la supresión del veto ruso a los productos del territorio murciano.
“Llevamos muchos años ya por debajo de los costes de producción” lamenta un empresario agricultor, al que cada vez le cuesta más hacer su explotación sostenible. Otro de los reclamos más sonados es la falta de control en la importación de productos: “Están trayendo cítricos, aceituna y aceite de otros países y no tenemos precios para competir” señala otro asistente, que critica la diferencia de calidad entre el producto de países extranjeros y el producido en España. Una de las insignias más repetidas era una pegatina que aludía a los productos nacionales como lo primero. “Queremos que lo que nosotros producimos tenga prioridad”.
Otro de los sectores más perjudicados en los últimos años es el de la apicultura. “Llevamos tres años por debajo de los costes de producción” ha señalado Carlos, apicultor murciano que ha lamentado la “insostenible” situación, producto de importaciones de mieles desde China, con costes mucho más bajos que la miel producida en Murcia. “No solo nos perjudica a nosotros, sino que afecta a todos los apicultores europeos”.
La manifestación ha finalizado frente a la sede de la Delegación del Gobierno donde se ha arrojado la carga de dos camiones repletos de brócoli, vendido por los productores por 0,50 euros frente a los 2,75 euros por el que se comercia en supermercados. A la manifestación se sumaron más de veinte organizaciones agrarias como Ucomur, Proexport, Fecoam, el Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (SCRATS), y sindicatos como UGT y CCOO.
Desde el comienzo del mes de febrero, los agricultores y ganaderos españoles están en pie de guerra, con 21 movilizaciones en todo el país que finalizan en Sevilla el próximo 25. Según reza el manifiesto con los diez motivos por lo que se están movilizando, los trabajadores del sector aseguran estár “al límite”: “Al límite de la rentabilidad, al límite de sus fuerzas, al límite de seguir con su trabajo o de tirar la toalla. Es la realidad que sufren las cientos de miles de familias que se dedican a la producción de alimentos en España”.
Los motivos por los que se están movilizando los agricultores y ganaderos:
1. Falta de precios justos: Los agricultores y ganaderos no obtienen un precio justo por sus productos que les permita alcanzar una mínima rentabilidad por el desequilibrio de la cadena agroalimentaria, que provoca que gran distribución e industrias sean pocos y poderosos y los agricultores muchos y débiles.
2. Subida de los costes de producción: [...] Esto ahoga a los productores de forma sangrante, hundiendo sus posibilidades de futuro y abocando al cierre a muchas explotaciones.
3. Recortes en las ayudas: las ayudas provenientes de Europa e incluso las que destina el Gobierno central y las Comunidades Autónomas llevan años sufriendo recortes [...].
4. Barreras comerciales: La imposición de barreras comerciales como el veto ruso, el Brexit o los aranceles de Trump a las aceitunas de mesa, al aceite y al vino son un grave problema para dar salida a muchas producciones.
5. Empoderamiento de los agricultores y ganaderos: Somos un actor clave en el futuro de la sociedad, pero no somos valorados como tal. Sin nosotros, no hay alimentos. Sin nosotros, no habrá un medio rural vivo y con futuro. Sin nosotros habrá más despoblación.
6. Reto climático: Los agricultores y ganaderos están aprovechando las protestas para defender su papel en relación con el reto climático. La capacidad de la agricultura y la ganadería para gestionar el entorno es indiscutible [...].
7. Control de la fauna salvaje: La convivencia entre la agricultura, la ganadería y la fauna salvaje debe ser controlada y regulada para que sea viable [...].
8. Reglamentación de ciclos cortos de comercialización, productos de proximidad y etiquetado en origen: [...] Urge un cambio legislativo para permitir que agricultores y ganaderos lleven a cabo la venta directa de sus productos.
9. Freno a la especulación con los productos agrarios: Mientras la rentabilidad de la agricultura está bajo mínimos, siguen produciéndose prácticas comerciales abusivas y desleales [...].
10. Reivindicación del papel vertebrador de la agricultura y la ganadería frente al despoblamiento, a los problemas ambientales y territoriales: La preocupación de la opinión pública sobre el problema demográfico y territorial crece día a día. El debate sobre la España vaciada ha saltado a los primeros niveles. Sin embargo, en ese debate los agricultores y ganaderos debemos cobrar un mayor protagonismo. Sin nosotros, no habrá futuro para el medio rural.