El Gobierno de Murcia ha rebajado, tras la inspección de los técnicos una vez se han podido sofocar las llamas, la superficie de terreno afectado por los incendios forestales declarados en pasado jueves y contra los que se ha trabajado intensamente hasta el domingo.
De las 300 hectáreas que se estimaban en Lorca, se ha pasado a 228, y de las 450 que se calcularon en Cieza y Calasparra, la cifra ha quedado finalmente en 306, de las que 217 pertenecen a la sierra de La Palera, 3,15 a la de La Serreta, 48,24 a la del Almorchón y 38 a El Mulatón o Alto de Almadenes. Tras cuatro días de lucha contra el fuego, ya sólo quedan 14 efectivos en las sierras ciezanas y 7 en la sierra lorquina haciendo tareas de enfriamiento del perímetro afectado y de vigilancia.
Esta semana se llevarán a cabo las evaluaciones de daños, la próxima se comenzará a preparar la estrategia de recuperación arbórea y seguimiento, y en septiembre se presentará a los municipios afectados el plan de actuaciones previsto para la regeneración de las sierras. La propuesta de recuperación incluirá la retirada de madera quemada y tocones muertos para evitar un posible ataque de la plaga del barrenillo que afecta a árboles debilitados, al tiempo que se consolidarán los suelos para evitar la erosión.
En Lorca, gran parte de la superficie afectada es de bosque mediterráneo maduro, por lo que hay un banco de semillas natural en el suelo que rebrotarán de forma espontánea. En Cieza, la sierra La Palera y la zona del cañón de Almadenes tendrán un plan distinto, pues la replantación de los pinos de las laderas de la hoz será más difícil al estar enraizados los quemados en suelos muy rocosos, mientras que la recuperación de los sabinares es más lenta.