Más de 2.500 agentes entre Policía Nacional, Guardia Civil, Policía Foral y Policía Municipal de Pamplona integran el dispositivo previsto para los próximos Sanfermines de 2023, que se mantiene en cifras similares al que se viene desarrollando en los últimos años. De los agentes que integran el dispositivo, unos 800 corresponden a Policía Nacional, 649, a Guardia Civil, en torno a 700, a Policía Foral, y 404, a Policía Municipal. A ellos hay que añadir los 179 auxiliares de Protección Civil que realizan labores de regulación y control de tráfico en puntos concretos, además de otras funciones de colaboración con Policía Municipal.
Así se ha acordado en la Junta de Seguridad celebrada este jueves en la Delegación del Gobierno en Navarra y a la que han asistido, entre otros, el delegado del Gobierno, José Luis Arasti; el vicepresidente primero y consejero de Presidencia, Igualdad, Función Pública e Interior en funciones, Javier Remírez; la alcaldesa de Pamplona, Cristina Ibarrola; así como los mandos de los cuerpos policiales, según informa Europa Press.
Las intervenciones estarán coordinadas entre todos los cuerpos policiales, y en el Ayuntamiento de Pamplona se instalará el centro de coordinación interpolicial. El CECOR cuenta con responsables de las cuatro policías (Policía Nacional, Guardia Civil, Policía Foral y Policía Municipal) y en él se visionan tiempo real la totalidad de las cámaras de seguridad y tráfico que el Consistorio tiene instaladas en el núcleo urbano.
Según ha afirmado Arasti en una rueda de prensa posterior a la celebración de la junta, el objetivo del dispositivo organizado es “velar por la buena marcha de las fiestas y garantizar la seguridad de todas las personas que pasen por nuestra ciudad” durante los Sanfermines. Arasti ha confiado en que van a ser unas fiestas “tranquilas”, si bien “la experiencia nos hace estar alerta ante posibles casos de agresiones sexuales”. “Que nadie se piense que en los Sanfermines cabe todo, que todo vale. Pamplona ha demostrado con rotundidad que no tolera agresiones sexuales y que los cuerpos policiales han trabajado con enorme eficacia para que ningún caso quede impune”, ha dicho.
Por su parte, Remírez ha señalado que “ya está todo preparado”. “El engranaje de coordinación de todas las policías está listo para afrontar, un año más, el mayor dispositivo de seguridad que se celebra en Navarra y quizás uno de los mayores del conjunto de España”, ha remarcado, tras destacar que se trata de un trabajo “fruto de una gran labor de coordinación” y realizar un llamamiento al “respeto y la igualdad”.
Finalmente, Ibarrola ha destacado la “magnífica coordinación entre cuerpos policiales para garantizar la máxima seguridad de todos los ciudadanos y visitantes”. También ha mostrado su “firme propósito” de que “se erradique cualquier actitud violenta que altere la convivencia”, como los acontecidos el pasado año en la calle Curia durante la procesión del 7 de julio. “Son lamentables sucesos que no deberíamos de permitir que volvieran a repetirse, supone una vergüenza para nuestra ciudad, una mala imagen”, ha criticado. En este sentido, ha esperado que la “convivencia y la normalidad imperen” en estas fiestas, “también en la procesión”.
En respuesta a los medios de comunicación sobre cómo puede a interferir la campaña electoral en las fiestas, Ibarrola ha explicado que se ha recomendado no realizar actos “en ciertos horarios, coincidiendo con ciertos actos y en determinados lugares muy específicos”. “Se evaluará una a una cada una de las solicitudes que lleguen, intentando respetar lo máximo que se pueda compatibilizar el derecho a ejercer actos electorales pero manteniendo el equilibrio de garantizar que sea compatible con la seguridad que tiene que tener todo ciudadano”, ha señalado.
La Policía Nacional movilizará a unos 800 agentes correspondientes a las unidades de caballería, desactivadores de explosivos TEDAX-NRBQ, subsuelo, la unidad de intervención policial, que se reforzará provenientes de distintas provincias de España, guías caninos o medios aéreos en sus modalidades de helicóptero y drones.
Además, la Unidad de Atención a la Familia y Mujer incrementará su actividad para prevenir acciones contra la libertad e integridad sexual. También aumentan las medidas de seguridad en espectáculos y acontecimientos que supongan grandes concentraciones de personas, así como las medidas de prevención en materia antiterrorista.
Asimismo, la Brigada de Extranjería de Policía Nacional pondrá “especial atención” en el control de documentaciones para detectar falsedades documentales. En el marco del proyecto Comisarías Europeas, se realizarán patrullajes conjuntos con agentes de Alemania, Italia, Portugal y Francia.
La labor de Guardia Civil se centra en el control de los diferentes accesos a Pamplona, tanto para la detección de posibles elementos terroristas como para la incautación de sustancias estupefacientes o de procedencia ilegal. También se refuerzan los controles preventivos de tráfico para la detección de consumo de alcohol o drogas. Del mismo modo, se incidirá en la inspección y control de las zonas de acampada, en el transporte de mercancías perecederas para consumo humano; o en el control de los espectáculos pirotécnicos.
Guardia Civil moviliza para ello a 649 agentes procedentes de la Unidad de Seguridad Ciudadana, sección de Fiscal y Fronteras, Agrupación de Tráfico, Grupo de Acción Rápida, Grupo de Especialistas en Desactivación de Explosivos y SEPRONA, entre otras unidades.
Por parte de Policía Foral, se prevén dispositivos específicos para los actos más multitudinarios, así como la vigilancia de la seguridad en la plaza de toros durante el encierro y las corridas de la Feria del Toro. Habrá, además, dispositivos dirigidos a prevenir robos en viviendas y a evitar la venta ambulante no autorizada.
También se incidirá en el ámbito de la seguridad vial mediante controles de tráfico en los accesos a la ciudad. Asimismo, el dispositivo recoge previsiones especificas dirigidas a evitar agresiones sexuales y otros delitos contra la libertad sexual durante el desarrollo de las fiestas como patrullajes específicos en parques y aparcamientos.
En el dispositivo, compuesto por más de 700 agentes, participarán efectivos de las áreas de Seguridad Ciudadana, Tráfico y Seguridad Vial, Seguridad Interior y Policía Administrativa, Investigación Criminal, e Inspección General. Esto implica la movilización “de la práctica totalidad” de las especialidades de Policía Foral.
Policía Municipal de Pamplona movilizará a 404 agentes, a los que se unirán 36 alumnos de la Escuela de Seguridad de Navarra y 179 auxiliares de Protección Civil. Se mantendrán activos los servicios habituales operativos durante el resto del año, como el grupo de atestados, el grupo de ODAC (recepción de denuncias penales), grupos de investigación de ilícitos penales, grupos de menores, mayores y familia (en particular, delitos contra la libertad sexual), o grupo de seguridad vial (regulación del tráfico en el núcleo urbano).
También estará operativo el servicio de objetos perdidos, abierto las 24 horas, y se ha previsto un dispositivo especial para el 7 de julio, durante la procesión. Así, va a incrementar el número de cámaras que lleve la Policía Municipal para poder identificar, junto con las cámaras fijas de la ciudad, a “aquellos ciudadanos que rompan la convivencia y perturben la seguridad ciudadana”. Los pasados Sanfermines se interpusieron 19 denuncias de 12.000 euros cada una a ciudadanos por incumplir la Ley de Seguridad Ciudadana, que ya se han pagado. Estos Sanfermines se incrementará la cuantía de las sanciones al grado máximo que permite la ley y pasarán de 12.000 a 30.000 euros.
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