La Audiencia Provincial de Navarra ha condenado este lunes a un hombre a 18 años de prisión por el asesinato de su pareja y socia en el bar que ambos regentaban en Pamplona. El crimen ocurrió el 1 de julio de 2023 en la cocina del establecimiento, cuando Fengling Yang, de 53 años, acabó con la vida de Zhen Jiang, de 47 y madre de 4 hijos, por la espalda y con un machete. El asesinato estremeció a la ciudad de Pamplona, que se concentró en la plaza Consistorial para condenar el crimen, en una protesta a la que acudieron las principales autoridades de la comunidad foral.
El acusado ha sido condenado a una pena de prisión de 18 años por un delito de asesinato con concurrencia de alevosía y agravante de parentesco, aunque también se le ha aplicado un atenuante de confesión, por haber acudido rápidamente a las dependencias de la Policía Municipal a confesar el crimen. Asimismo, se le ha impuesto la inhabilitación absoluta y el pago de las costas procesales.
Una vez cumplidos dos tercios de la condena o haber accedido al tercer grado, el acusado será expulsado del territorio nacional y no podrá regresar en diez años. Si trascurrida la década decidiese regresar a España, la sentencia le impone diez años más de libertad vigilada y la prohibición de comunicarse con los hijos de la víctima, así como acercarse a menos de dos kilómetros de su domicilio, lugar de trabajo o lugar en el que se encuentren.
Finalmente, la sentencia también impone a Fengling Yang una indemnización de 552.383 euros que deberá abonar a los cuatro hijos de la víctima. La sentencia se ha dictado en conformidad con todas las partes, representadas por la fiscalía, los abogados de la defensa, la acusación encarnada por los hijos de la víctima, y de las acusaciones populares -Ayuntamiento de Pamplona, Gobierno de Navarra y Servicio municipal de Atención a las Mujeres-. En la breve vista oral que ha tenido lugar este lunes en el Palacio de Justicia, la traductora le ha preguntado al acusado si estaba conforme con la pena impuesta, a lo que el acusado ha respondido que “sí”, mientras las partes han ido mostrando una a una su conformidad con el acuerdo.
La fiscal María Cruz García Huesa ha declarado ante los medios que “incluso teniendo en cuenta las últimas condenas que ha habido por parte de jurados en Navarra, la pena es más elevada que las condenas que han existido”. García Huesa ha explicado que la pena es un año inferior al acuerdo que ella misma le había propuesto al abogado de la defensa, que este decidió finalmente rechazar.
Sin embargo, acabó llegando a un acuerdo con la acusación particular, que es el que ha sido llevado a la sentencia dictada este lunes por la Audiencia de Navarra. “Estoy satisfecha con la pena, y me parece que es un resultado que materialmente produce justicia, aunque moralmente es evidente que para los hijos no llega a suplir la falta de su madre”, ha lamentado.
Por su parte, el abogado del Ayuntamiento de Pamplona, Víctor Sarasa, ha considerado el acuerdo “satisfactorio” para las partes, ya que “se ha hecho justicia y la condena es importante, aunque esto siempre depende del prisma con que lo vea cada uno”.