EH Bildu ha solicitado este lunes en el Congreso de los Diputados la comparecencia del ministro de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, para que aclare la implicación que tuvieron Manuel Fraga y otros cargos del Ejecutivo de Arias Navarro en la matanza de Montejurra de mayo de 1976 en la que fallecieron dos personas después de que se haya conocido la existencia de documentos “confidenciales” que apuntan a la intervención de Estado en los sucesos con el fin de evitar lo que consideraban una “concentración subversiva contra el Rey D. Juan Carlos”.
La coalición abertzale quiere que el Gobierno “dé cuenta de la información que pueda tener en su haber, en función de los archivos, documentos e informaciones que posee, sobre los graves sucesos de Montejurra y las implicaciones del Gobierno encabezado por Carlos Arias Navarro durante la dictadura franquista. En concreto, los documentos ahora conocidos señalan la implicación en los hechos del exministro Manuel Fraga Iribarne y el exgobernador civil de Navarra, José Ruíz de Gordoa”, señalan desde EH Bildu.
Se trata de unas cartas entre el gobernador civil de Navarra José Luis Rodríguez de Gordoa con Manuel Fraga (ministro de Gobernación), además del director general de Seguridad y al de Política Interior en las que se plantea la necesidad de frenar la tradicional peregrinación que los carlistas realizaban el primer domingo de mayo a la cima de Montejurra, cima próxima a la localidad de Estella, para homenajear a los requetés muertos durante la Guerra Civil.
En una de las misivas el gobernador civil propuso que el Estado prestase apoyo a la facción del carlismo más “tradicionalista” que se oponía a la línea progresista del partido liderado por Carlos Hugo. Así, en otra carta, el director general de Seguridad ofreció “refuerzos” para un hipotético enfrentamiento entre “tradicionalistas” y “los que quieren llevar al carlismo por las vías socialistas que ha iniciado Carlos Hugo”.
Finalmente, el 9 de mayo de 1976 atacantes ultraderechistas hicieron uso de las armas en la cima de Montejurra, así como en la zona del Monasterio de Irache, en la localidad de Ayegui, cercana a Estella, matando a los carlistas Aniano Jiménez Santos y Ricardo García Pellejero y dejando heridas a más de 30 personas. Unos hechos que no se juzgaron por la ley de Amnistía de 1977. En 2003 la Audiencia Nacional reconoció a las dos personas asesinadas víctimas de terrorismo.