La semana pasada Podemos e Izquierda Unida cerraron en Navarra, junto a Batzarre -otra formación de izquierdas-, las bases para confluir en un frente amplio similar al que está impulsando a nivel nacional Yolanda Díaz con otras personalidades destacadas de la izquierda. La formación morada cierra de esta forma una coalición con Izquierda Unida en uno de los pocos lugares en los que todavía no existía tras años de división que han costado votos en las urnas y escaños en las instituciones.
Representantes de las tres formaciones políticas señalan a elDiario.es que este era un objetivo que llevaban persiguiendo tiempo para reunir al electorado situado “a la izquierda del PSOE” bajo unas mismas siglas. Ninguna da el proyecto por cerrado y aseguran que ahora buscarán sumar a independientes para hacer el frente “todavía más amplio” de cara a los comicios forales del 2023.
“Teníamos claro que era el objetivo principal de Podemos desde que llegamos a la dirección del partido”, explica Begoña Alfaro, coordinadora autonómica de la formación morada en Navarra. “Queríamos intentar que todo el espacio político y social a la izquierda del partido socialista conformase un proyecto único a medio y lago plazo”, añade. Tras varias reuniones con las nuevas direcciones de Izquierda Unida y Batzarre, esta semana las tres formaciones sentaron las bases de lo que denominan como un “frente amplio” de izquierdas.
“En 2019 nos confundimos”
El germen de la coalición surgió en 2019 cuando, Podemos e Izquierda-Ezkerra (IU y Batzarre) se presentaron por separado a las elecciones logrando un resultado muy pobre en comparación con el conseguido en 2015 -donde tampoco concurrieron en coalición-, cuando ambas formaciones formaron parte del Gobierno de Uxue Barkos con Geroa Bai y EH Bildu. Las dos formaciones no lograron movilizar a su electorado, tal y como reconocen sus representantes, y Podemos logró únicamente retener dos escaños de los siete conseguidos en 2017, mientras que Izquierda-Ezkerra pasó de dos a uno.
“En 2019 nos confundimos, esa desunión de la izquierda desmovilizó a nuestro electorado y lo pagamos en las urnas”, apunta Carlos Guzmán, nuevo coordinador general de Izquierda Unida en Navarra. Txema Mauleón, de Batzarre, añade: “Había que hacer autocrítica y está claro que la falta de unidad fue la que hizo que no despertáramos la ilusión en la gente”.
De esta forma Podemos e Izquierda Unida cierran una coalición en una de las pocas comunidades donde todavía no existía después de que en 2016 ambas formaciones se agruparan a nivel nacional bajo el nombre de Unidos Podemos, primero, y desde 2019 Unidas Podemos. El proyecto todavía no está cerrado, según aseguran desde las tres formaciones, que buscan sumar ahora nuevas figuras independientes del mundo social para “ensanchar” todavía más el “frente amplio”. “Ya hay algunas personas que han mostrado interés en sumarse al proyecto, que ya notamos que está generando ilusión”, asegura Carlos Guzmán.
Tampoco se ha elegido por el momento un nombre para la coalición, ni se ha decidido el peso que tendrá cada una de las formaciones en los órganos de dirección ni en las listas. “Estamos en una fase inicial y lo único que se ha consensuado hasta la fecha es la voluntad de las tres formaciones de confluir en este espacio más amplio de izquierdas”, indica Begoña Alfaro.
Tanto desde Podemos como desde Izquierda Unida tienen claro que el modelo a seguir es el de Yolanda Díaz, que en las últimas semanas junto con otras representantes de la izquierda como Ada Colau, Mónica Oltra, Mónica García o Fátima Hamed Hossain ha lanzado un mensaje del “comienzo de algo que va a ser maravilloso” bajo un frente amplio común. “Tenemos la misma filosofía y la misma hoja de ruta”, asegura Alfaro; “Tenemos la misma apuesta por ese frente común”, añade Carlos Guzmán; “Tenemos clara la necesidad de la unidad”, apunta Txema Mauleón.
Según explican ambas formaciones, en las próximas semanas se irán concretando más detalles del nuevo proyecto así como la incorporación de nuevas figuras.