Navarra acumula 2.000 infracciones al año por circular sin carné de conducir

La comunidad foral registra más de 2.000 infracciones al año por circular sin carné de conducir, lo cual supone que el 2% de las multas de Tráfico anuales que se registran en Navarra se debe a esta infracción, ya sea por no haberlo obtenido o por la pérdida total de puntos. Según Formaster, Asociación Profesional de Empresas Formadoras en Logística, Transporte y Seguridad Vial, este es un dato “muy preocupante”, ya que a esto se suman las infracciones por conducir sin seguro en Navarra, que suponen el 2,48% de las multas anuales, una media de casi 2.800 sanciones al año.

Conducir sin puntos en el carné está tipificado como delito con penas de prisión de hasta 6 meses y trabajos a la comunidad o como infracción, según su gravedad. Por un lado, es un delito contra la Seguridad Vial según el artículo 384 del Código Penal cuando se conduce sin carné por la pérdida total de los puntos asignados legalmente, por decisión judicial o por no haberlo obtenido nunca. En estos casos, las penas pueden llegar a ser de prisión de hasta 6 meses y multas de 12 a 24 meses o trabajos para la comunidad de hasta 90 días, según los agravantes (como conducción temeraria, alcohol), la reincidencia o antecedentes penales. Por otro lado, ponerse al volante sin carné puede ser considerado infracción cuando se conduce con el carné caducado, por conducir un vehículo de otra categoría o conducir con un permiso no homologado en España. En estos casos las multas suponen la pérdida de 4 puntos y sanciones de entre 90 y 200 euros, informa Europa Press.

Si se pierden totalmente los puntos, el conductor no podrá recuperar la autorización para conducir hasta pasados 6 meses (3 meses para los conductores profesionales) y deberá de hacer un Curso de Recuperación Total de Puntos, además de realizar un examen teórico en la sede de la Jefatura de Tráfico de Navarra. Se calcula que en España más de 2 millones de conductores circulan sin el seguro mínimo de Responsabilidad Civil, una “imprudencia” que conlleva una sanción económica de entre 601 y 3.005 euros que “irá contra el dueño del vehículo”. Según la asociación, el conductor asumirá los daños que ocasione a otras personas, vehículos o contra el mobiliario urbano y el dueño del vehículo será responsable solo civilmente. Los agentes podrán inmovilizar el coche entre uno y tres meses, durante ese tiempo el dueño deberá de hacerse cargo de los gastos de custodia del mismo.