Navarra se instala en el caos estadístico de la pandemia

Navarra, a diferencia de otras comunidades sigue informando diariamente del avance de la pandemia en la sexta ola, si bien el reporte con la actualización diaria de la evolución de la COVID-19 ha quedado reducido desde hace unos meses a una tabla en la que se resumen los datos básicos de ese día: número de positivos y pruebas realizadas en el último día, fallecimientos e ingresos hospitalarios registrados en las últimas 24 horas y el número total de pacientes hospitalizados y en UCI en el momento actual. También se actualizan las cifras de vacunación, indicando las dosis que se han inoculado en el último día, así como el total acumulado y el número de personas con la pauta completa.

A esta reducción de los datos diarios facilitados por el Gobierno foral hay que sumar el caos estadístico de las últimas semanas coincidiendo con el gran aumento de la incidencia que ha llevado a Navarra a rozar los 6.000 casos por cada 100.000 habitantes. Desde hace varias jornadas, cada día “afloran” casos positivos correspondientes a fechas anteriores y las cifras emitidas por el Departamento de Salud no coinciden a su vez con las del Ministerio de Sanidad. Sin ir más lejos, este martes el Gobierno foral informó en un primer momento que el lunes el Servicio Navarro de Salud había notificado 3.136 nuevos casos de COVID-19. Horas más tarde cambió la cifra a 3.295, mientras que el Ministerio en su informe diario reportó 3.127. El miércoles se aumentó la cifra a los 3.592.

En otro caso similar, el jueves de la semana pasada pasó a ser el día con el máximo de contagios diarios registrado hasta la fecha con 4.477 positivos, después de que el sábado se le añadieran más de 600 casos adicionales a la cifra oficial comunicada inicialmente.

Este desfase de las cifras de contagios diarios reportados comenzó a registrarse la semana pasada cuando el Gobierno foral anunció que se comenzarían a validar los positivos detectados con autotest sin necesidad de confirmación de una prueba PCR. Ante la saturación de la Atención Primaria y el sistema de rastreo, Salud remitió una carta a los centros de Atención Primaria informándoles de este nuevo protocolo.

Los positivos detectados mediante test de antígenos y las pruebas reportadas por los laboratorios privados, a donde mucha gente acude a hacerse una prueba diagnóstica, está provocando retrasos en la comunicación de los datos que provocan que de un día para otro surjan centenares de nuevos positivos previamente no cuantificados.

La validación de los contagios detectados por autotest ha provocado también una distorsión en la tasa de positividad reportada diariamente por el Servicio Navarro de Salud. Según la Organización Mundial de la Salud si se encuentra por encima del 5% significa que existe trasmisión comunitaria. En las últimas jornadas, esta tasa no ha bajado del 40% en la comunidad foral, llegando a superar algún día el 50%. Este aumento de la positividad se explica por las pruebas de antígenos realizadas en casa, de las que solo se comunican los resultados positivos y no los negativos, lo que engorda la estadística.