Aitor Urdaniz y Cristina Uzqueda viajaron el año pasado por primera vez a Kenia y Tanzania. Como muchos matrimonios que hacen el viaje de sus vidas, intentaron controlar los precios, acercarse a la vida local, contactar con guías que hablaran en castellano. Y no fue fácil. Ellos preferían que el dinero destinado al viaje fuera a parar directamente a agencias de viaje locales, no a los intermediarios. Y, al final, lo lograron. La experiencia fue tan buena que decidieron dar forma a una idea para gestionar experiencias similares. Y así nació Udare, una plataforma que, desde Pamplona, conecta a personas interesadas en preparar safaris o viajes de trekking con agencias locales de estos países africanos. Y no les va mal. Empezaron en febrero de este año y pronto se acercarán a los diez viajes contratados.
“¿Qué tiene África que atrae tantos visitantes? Es difícil generalizar. La gente que acude a Tanzania, por ejemplo, busca recorrer los parques o ver animales… vivir algo que no podría vivir en otra parte del mundo”, cuenta Urdaniz. Él es la voz al otro lado del teléfono de Udare, y reconoce que la pasión con la que habla de este tipo de viajes es la que engancha a quienes se interesan por estos safaris más personalizados (lejos de los más comerciales, con más de una decena de viajeros y en los habituales camiones descubiertos), recorridos hacia las nieves del Kilimanjaro o descansos en las islas paradisíacas de Zanzíbar.
A Udaniz le encanta viajar. Cristina y él habían recorrido parte de Australia, Asia o América, pero en África encontraron ese algo diferente que te hace repetir. Conectaron con sus guías, les encantó su forma de preocuparse por el cliente, y decidieron servir de enlace desde Navarra con Arusha, en Tanzania, y con Kenia. Así nació Udare, un acrónimo con un significado especial para Aitor, que en inglés (U-dare) además viene a traducirse como ‘Te atreves’, al igual que en swahili. Y se atrevieron. En febrero de este año crearon una sociedad limitada, en marzo lanzaron la página web y ya gestionaron sus primeras reservas.
Este tipo de plataforma es un reflejo de las facilidades que brinda Internet. Hace diez años, habría sido imposible. Pero ahora, con una web, una conexión frecuente vía Skype con Tanzania, una presencia trabajada en las redes sociales y un teléfono accesible fuera de los horarios de oficina y durante los fines de semana, este sueño de unos viajeros entregados es una realidad.
Constantes pese a la crisis
“Al final, si un cliente busca una agencia al uso, no nos encuentra. Quien nos llama quiere contactar con agencias locales africanas, lleva años viajando y quiere ahorrarse intermediarios, saber que el dinero llega directamente allá”, explica. Y ya hay reservas de viajes de novios, de familias o de parejas que quieren una última concesión antes de lanzarse a tener hijos. Son personas hispanohablantes (incluso en una revista de México ha habido alguna reseña sobre Udare) que, a pesar de la crisis, siguen viajando a África, aunque también busquen limitar los precios. “Hay viajes en avión a Nairobi por 550 o 600 euros, ida y vuelta. Nosotros podemos asesorarles en eso, en gran parte porque también hicimos el mismo viaje”, cuenta. No en vano, la web de la plataforma dispone de un apartado especial, llamado el 'Diario del viajero', en el que sus responsables cuentan curiosidades sobre la fauna, la flora, la gente y las tradiciones de estas zonas. Todas ellas son razones para estar más cerca de África.
De hecho, Aitor pronto hará las maletas para viajar hasta allí por tercera vez en menos de un año. La agencia local, desde Tanzania, tiene contactos con homólogos de Kenia y pronto esperan llegar a acuerdos similares con Uganda. Udare sigue afianzándose entre quienes buscan una forma de viajar diferente. Se plantearon este año como una toma de contacto, pero ya han gestionado reservas para este verano e, incluso, para 2015. En ese crecimiento, el boca a boca y las recomendaciones de los clientes pueden marcar la diferencia. Y, en este caso, Udare tiene África de su parte.