Una parte del parking subterráneo del Palacio de Justicia se vino en parte abajo el pasado 7 de febrero. En concreto, la situada bajo un jardín, que se desprendió desde la planta 0 hasta la -4. El accidente, que no tuvo víctimas, generó dudas sobre la construcción del recinto. Fuentes de la plantilla de la Agencia Navarra de Emergencias (ANE) aseguran que el agujero que dejó ese siniestro no es solo visible en el aparcamiento: también puso en evidencia las necesidades del servicio de Emergencias. Porque hasta la zona, pese a estar ubicada muy cerca del parque de bomberos de Trinitarios, acudieron desde Cordovilla porque en el más cercano “estaban cubriendo sus servicios”.
Este es solo un ejemplo de la situación de necesidad de dotación en general de la ANE y del desvío de funciones de los bomberos al transporte sanitario que denuncian desde Trinitarios en particular. El personal ya ha protagonizado diversas movilizaciones para exigir más personal y menos parcheos (como se refieren a la movilidad de bomberos entre parques), y advierten de que, de no ponerle remedio, desde el Gobierno Foral “se está jugando con fuego”. Las cifras que manejan desde la plantilla es que, si en la actualidad hay 365 bomberos operativos (más 33 en servicios auxiliares) y 17 de ellos son mayores de 55 años, conforme cumplan edad otros trabajadores habrá nueve menos en 2015, otros once en 2016, 14 más en 2017, y así hasta plantarse en 2018 con 304 bomberos. De ahí que vean la oposición anunciada por el actual Ejecutivo, de diez plazas, como una oferta que no soluciona unas dotaciones ya de por sí “raquíticas”.
Este balance contrasta con el realizado recientemente por el responsable de la ANE, Eradio Ezpeleta, frente al Parlamento. El representante del Gobierno Foral volvió a defender que no hace falta más personal e insistió en que se ha mejorado la operatividad del servicio con una optimización de los recursos. Las cifras de Ezpeleta son que para cubrir los parques hacen falta 322,40 bomberos, y que una orden foral eleva esa cifra a 347; y, sin embargo, Navarra cuenta con 385 (cifra que no concuerda con la visión ofrecida por la plantilla, y que esta desmiente). Ezpeleta se mantiene, por tanto, en su postura de que “no existe un problema de número de bomberos”, a la vez que recordó que habrá una oposición de diez plazas.
Desde el personal, por su parte, ven esto como una contradicción. E insisten, incluso, en que esas diez plazas se quedan muy lejos de las necesidades reales. Desde la plantilla, como ya adelantó eldiarionorte Navarra, critican que solo en 2014 se amaneció en 177 jornadas con parques bajo los mínimos establecidos (centros como Navascués, por ejemplo, necesitan un mínimo de tres bomberos, Estella cuatro, Cordovilla once…), que a través de esa movilidad entre parques (un bombero llega a un parque que supera esa dotación mínima y es trasladado a otro que está bajo mínimos; una operación que el año pasado afectó a 152 efectivos) no llegó a solventar todas esas carencias durante 106 jornadas.
Por todo ello, desde la plantilla critican que los responsables de la ANE han querido vestir con cifras “y mentiras” la realidad de los parques navarros. Y esa es, según estas fuentes, que ante estas necesidades de personal, en un plazo cercano de tiempo el personal tendrá que adelantar jornadas para cubrir las necesidades, tirar de horas extras (una posibilidad a la que se oponen), cerrarse alguno de os parques o bajar esos mínimos de cada dotación.
Trinitarios, dedicado al transporte sanitario
Esta denuncia se suma a la ya realizada desde el parque de Trinitarios, cuyo personal ha criticado que el Ejecutivo ha intentado cubrir con la ambulancia de los bomberos las necesidades del transporte sanitario. Afirman que la plantilla de este punto de Pamplona está dedicada “casi en exclusividad” al transporte de enfermos y enfermas, y eso a pesar, según denuncian, de que los efectivos “no tienen la titulación porque no había ambulancia en dicho parque”, algo que también han criticado los sindicatos que representan al transporte sanitario en Navarra.