La plantilla de Volkswagen Navarra, en el polígono pamplonés de Landaben, asegura que, por un lado, se sienten sobrepasados por la cantidad de información que llega desde fuera de la empresa y, por otro, siguen a la espera de noticias por parte de Dirección sobre cuál será la producción de la planta antes de que acabe el año. La noticia de que la Audiencia Nacional ha aceptado investigar el fraude de la compañía alemana ha provocado diversas reacciones entre los representantes sindicales: UGT ve “oportunismo” por parte de la acusación, CCOO espera que la investigación sirva para depurar responsabilidades y LAB se muestra escéptico sobre el recorrido de un proceso que, cree, debería centrarse en Alemania, si se pretende aclarar cómo fue la toma de decisiones.
El juez de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno, se ha declarado competente para investigar el caso del trucaje de los motores diésel de la compañía alemana, y, por tanto, da así inicio a un procedimiento penal. La Fiscalía habla de publicidad engañosa, fraude de subvenciones y delito contra el medio ambiente, y, en el auto, pide información sobre cuántos coches se han vendido en España con el polémico software que manipulaba los datos de emisiones durante los controles, pero también, entre otras informaciones, solicita todos los comunicados realizados por Volkswagen sobre este asunto, la información disponible del Ministerio de Industria sobre la Agencia medioambiental estadounidense (donde se destapó el escándalo) o el organigrama del grupo en España. Entre las diversas entidades de la acusación particular de este caso, figura el colectivo de funcionarios públicos Manos Limpias. Preguntados sobre esta noticia, desde la Dirección de la planta navarra han decidido no hacer valoraciones.
La noticia vuelve a generar dudas en una fábrica que, según reconoce el presidente del Comité de Empresa, el integrante de UGT Alfredo Morales, vive día a día con “incertidumbre”. Eso sí, Morales asegura que ve “oportunismo” en esta querella iniciada por Manos Limpias. Por el contrario, desde CCOO, su responsable en Landaben Navarra, Eugenio Duque, espera que, si siguen adelante los procesos judiciales, se aclare “y haya consecuencias penales” para las personas responsables de este fraude que, insiste, no es la plantilla de una planta de montaje como la de Landaben. Preguntado sobre si cree que este proceso aclarará lo sucedido, Duque insiste en que “lo que no puede pasar es que no pase nada”.
Desde el sindicato LAB, Raúl Portillo confiesa que esta noticia es, pese a su importancia, “una más y estamos saturados de información”. Portillo habla de las posibles consecuencias del escándalo que, según lamenta, siguen generando rumores en la planta: posibles ajustes de la producción (que para 2015 se había ampliado, poco después de conocerse el escándalo, para cerrar este año con 299.589 vehículos), si se prolongarán las vacaciones de Navidad para ajustar ese calendario y si, sobre todo, esto tendrá consecuencias para la plantilla.
El siguiente paso: el balance de ventas
Para aclararlo, desde todos los sindicatos consultados esperan reunirse en breve con la Dirección para conocer el nuevo balance de ventas, que aún no ha llegado desde Alemania. En el primero tras destaparse el fraude, que se produjo a finales de septiembre, desde la Dirección se aseguró que no se había percibido ese impacto, algo lógico teniendo en cuenta que gran parte de los encargos se hace a dos meses vista. Ahora, no obstante, el Comité espera aclarar en este nuevo balance cuál es la respuesta del mercado al fraude (en todo el mundo, las ventas han caído un 2,7% en los nueve primeros meses del año) y a las ventas del Polo, el modelo en el que se centra el trabajo de Landaben y que no figura entre los afectados por la polémica. Los representantes sindicales coinciden ahora en que ven probable no llegar a las cifras anunciadas hasta la fecha, aunque esta semana la producción es de 1.470 vehículos al día.
El siguiente paso será aclarar las inversiones previstas para los próximos ejercicios, un tema que también ha generado división entre los sindicatos, porque desde UGT y CCOO insisten en que está garantizado todo aquello que ya estaba consignado (se habló, tras la firma del convenio a finales de 2013, de entre 785 y 820 millones hasta 2017) para impulsar el nuevo modelo de Polo, el A07. Por el momento, las obras en la nueva nave de chapistería siguen adelante.
También está prevista una nueva reunión en Madrid entre representantes sindicales y del Gobierno central, a la que asistirán representantes de Navarra de UGT y CCOO, aunque ambos se muestran suspicaces sobre el propósito de la cita y si servirá para aclarar un panorama de Volkswagen en España, al que ahora se suma este proceso en la Audiencia Nacional y el anuncio, recogido por Europa Press, de que Seat prescindirá en Martorell (Barcelona) de 400 empleados de empresas de trabajo temporal, cuyos contratos finalizan entre este mes y julio de 2016. Desde Landaben hubo centrales que auguraron medidas similares, mientras, en general, siguen a la espera de anuncios oficiales entre “un maremágnum de noticias”.