¿Con quién puede pactar Podemos en Navarra? Los increíbles (en diversos sentidos, como han manifestado algunos partidos) resultados obtenidos por la formación en la encuesta del Navarrómetro han avivado este debate, sobre si el partido liderado por Pablo Iglesias tendrá independencia en la Comunidad Foral a la hora de decidir con quién se alía tras los resultados electorales. La posibilidad de una alianza con Bildu que evite un nuevo gobierno de UPN es la que ha suscitado estas dudas, y el candidato a secretario general del partido en Navarra, Isaac Hoyos, responde: “Los pactos los aprueba la asamblea en Navarra”. Pero también matiza que, si esa alianza, ya sea en Navarra o por ejemplo en un municipio, choca con el ideario de la formación, cualquier persona del partido puede plantear que ese tema se debata en la asamblea nacional.
¿Cuál es la diferencia, entonces, entre Podemos y, por ejemplo, la decisión del PSOE nacional de vetar la moción de censura contra la presidenta del Gobierno Foral, la regionalista Yolanda Barcina? “La clave es que, en Podemos, eso no lo decide Pablo Iglesias ni el Consejo Ciudadano, sino la asamblea. Las decisiones se toman desde las bases”, responde Hoyos. Este sistema es el que se aprobó durante el proceso para elegir a Iglesias como secretario general y no es exclusivo de Navarra, sino que se puede aplicar en cualquier autonomía e, incluso, en un municipio. Cualquier persona puede obligar a revisar un pacto alcanzado de forma local si considera que contraviene los principios éticos, políticos y organizativos de Podemos. De ahí que augurar posibles encuentros parezca, cuando menos, complicado.
El Navarrómetro, una encuesta encargada por el Parlamento de Navarra que ha otorgado 18 escaños (de 50) a Podemos y la ha colocado como primera fuerza política en la comunidad, ha provocado estas cábalas. Y, de hecho, un día después de conocerse los resultados, el candidato de EH Bildu a la Presidencia del Gobierno Foral, Adolfo Araiz, abrió la puerta al diálogo con Podemos para lograr “un cambio político sin exclusiones”. Bildu, por cierto, se situó en ese sondeo como segunda fuerza en Navarra, con 11 escaños, frente a los 8 de UPN o los 5 del PSN.
Así, pese a las dudas generadas por la encuesta y sobre si no se ha ‘cocinado’ o trabajado lo suficiente (como señala Félix Taberna en este artículo de opinión), la lectura en la que han coincidido muchas fuerzas políticas es en que los resultados reflejan una apuesta por el cambio, que, como es tradicional por la fragmentación de la Cámara navarra, dependería de la posibilidad de llegar a acuerdos. A la pregunta de si puede fraguar un entendimiento entre Podemos y Bildu, añadió leña al fuego este sábado una entrevista realizada en Diario de Noticias a la integrante de la dirección nacional de Podemos Ione Belarra, quien aseguró que las decisiones de posibles pactos las marcarán las bases “a nivel nacional”. En concreto, apuntó que “los pactos electorales se decidirán por todos los inscritos e inscritas en Podemos de cada territorio, que constituyen cada Asamblea Ciudadana Territorial”.
Sin embargo, a través de la web de Podemos en Pamplona, la propia Belarra ha aclarado estas declaraciones al asegurar que “tal y como aparece en los documentos organizativos aprobados en la Asamblea Constituyente Sí Se Puede, los pactos electorales se decidirán por todos los inscritos e inscritas en Podemos de cada territorio, que constituyen cada Asamblea Ciudadana Territorial. Lo que quería enfatizar con mis palabras es que todas las personas inscritas decidirán los pactos, y no los Consejos Ciudadanos”.
La decisión, de las bases
La diferencia es clave, puesto que una cuestión son las bases, y otras, las caras visibles de la formación. En este sentido, Hoyos, miembro del Círculo de Zizur Mayor, insiste en que los pactos, tanto antes como después de las elecciones, los decide la asamblea en Navarra. Después, en caso de que alguien de la formación considere que esos pactos contravienen el interés del partido, se pueden llevar a un órgano que decida en todo el país, que es la asamblea nacional. De esta forma, las decisiones las tomaría la asamblea navarra, pero podría ser revocada por el órgano correspondiente en España. Un sistema que deja, por tanto, todas las puertas abiertas a posibles pactos, pero también a su revocación.
Estas posibilidades, en cualquier caso, por ahora son hipótesis que no se pueden plantear hasta conocer los resultados electorales o que cobre forma la elección de los órganos del partido (Secretaría General, Consejo Ciudadano y Comité de Garantías) en Navarra, un proceso constituyente que, en principio, estará listo el 15 de febrero. Hasta entonces, insiste Hoyos, puede haber opiniones personales de los integrantes de Podemos, para nadie puede hablar en nombre de la formación, salvo para aclarar lo ya aprobado en los principios del partido, como en este caso.