La portada de mañana
Acceder
La declaración de Aldama: “el nexo” del caso Ábalos apunta más arriba aún sin pruebas
De despacho a habitaciones por 1.100 euros: los ‘coliving’ se escapan de la regulación
Opinión - ¿Misiles para qué? Por José Enrique de Ayala

Por un San Fermín en lengua de signos

¿Para qué sirven las conversaciones por vídeollamada? ¿Qué valor añadido aporta ver la cara de quien está al otro lado del teléfono? Para las personas sordas, esta posibilidad ha supuesto una revolución. Al igual que Skype, el chat de Facebook o WhatsApp. Este tipo de aplicaciones de mensajería instantánea, convertidas ahora en uso común, ha facilitado a las personas con problemas de audición emplear la lengua de signos por teléfono. Estar más conectados. Una medida que para ellos supone un paso enorme hacia la igualdad y que, para el resto de la población, supone también un valor añadido para la comunicación. Y eso a pesar de que, para poder contratar este tipo de servicios, las personas sordas necesiten a un intermediario para que pueda pelearse con unas compañías telefónicas que no ofrecen la posibilidad de un intérprete. Como casi todos los usuarios, pero todavía con más obstáculos.

Estos avances, que a veces pasan desapercibidos para el gran público, sirven de ejemplo de qué supone para la Asociación de Personas Sordas de Navarra (la más antigua vinculada a la discapacidad en Navarra, y que en la actualidad agrupa a 190 socios) que la información en las páginas web esté traducida a la lengua de signos. Porque no basta con que esté escrito en castellano, tiene que ofrecerse en otra lengua. Y, dado que el Ayuntamiento de Pamplona no ofrece esta posibilidad en su web sobre los sanfermines, Asorna se ha decidido a hacerlo por su cuenta. Con la misma información que está disponible en la web oficial, pero de forma accesible. Se trata, por un lado, de ofrecer datos prácticos sobre la fiesta y, por otro, de garantizar la atención sobre todo a personas sordas que durante esas jornadas visiten la capital navarra. Por ejemplo, por este mismo motivo también se mantiene en Asorna el servicio de intérpretes, que habitualmente cerraba durante las fiestas. Sin embargo, ahora una intérprete está disponible durante cuatro horas cada mañana de los festejos. Basta con solicitar su ayuda a través del blog de la entidad, en persona en la asociación, por teléfono o fax.

El blog, por cierto, es el que ha permitido ofrecer la información de los sanfermines en lengua de signos. Este proyecto arrancó ya el año pasado, pero en este se han aumentado los contenidos, especialmente los relativos al encierro, como las normas, el recorrido o las características de cada tramo (e, incluso y como extra, la traducción del cántico del encierro), cuestiones sobre las que había demanda (especialmente se constató a través de las redes sociales) puesto que también hay personas sordas que participan en él, “aunque la gente siga sorprendiéndose de ello, porque se preguntan ¿realmente pueden correrlo? Pues claro que pueden”, cuenta la responsable de comunicación de la asociación, Katixa Castellano.

El sistema empleado para ofrecer los datos en lengua de signos es sencillo: la información se toma tal cual de la página del Ayuntamiento, se graba mediante un vídeo en lengua de signos y este se proyecta tanto en la web como en el portal YouTube. Estas nuevas mejoras están disponibles ya desde hace un mes, y se mantendrá durante todo el año. La idea, de hecho, es seguir ampliando la información con el paso del tiempo. “No tenemos muchos recursos, pero tampoco es difícil ofrecer este servicio”, cuenta Castellano.

Desde la asociación también ven como una cuestión de voluntad, por ejemplo, lograr un Chupinazo accesible, que es otra de las demandas con mayúsculas que plantean a la entidad. Para lograrlo, bastaría con colocar a un intérprete de signos junto a la persona que tira el cohete, algo que por ejemplo ya acurre en la Aste Nagusia bilbaína. Con este cambio, se permitiría a las personas sordas disfrutar del inicio de las fiestas a la par que el resto de los ciudadanos. Y la asociación, que también ha reclamado una ventana con un intérprete durante la retransmisión en televisión, ya pelea para conseguirlo.